Tras la recopilación de partes de accidentes leves y graves por parte de la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (UNESPA), la Fundación RACC ha elaborado un informe en el que afirma que, aun siendo los automóviles antiguos los que deberían tener más índice de siniestralidad, dada su menor capacidad de respuesta, son los nuevos, con un 16% sobre la media, los que más accidentes sufren. Pero este índice baja ostensiblemente cuando el vehículo pasa de los 5 años de antigüedad.
Por otro lado, el estudio concluye que las mujeres son más seguras al volante que los hombres, ya que adquieren la madurez en 8 años, mientras que a los hombres les cuesta dos años más. Es a partir de los 35 años cuando el nivel de conducción se equilibra entre los dos sexos. Como media se diría que un hombre es maduro en la carretera en torno a los 33 años mientras que las mujeres lo suelen conseguir a los 27. Las conductoras noveles tienen menos accidentes, ya sea en motocicleta, turismo o ciclomotor.
La causa de que las mujeres sean conduciendo está en que son más perceptivas del peligro y por tanto más prudentes. Evitan comportamientos agresivos y se muestran más preocupadas por sufrir un accidente de tráfico. Sorprendentemente, la franja de mujeres comprendidas entre 41 y 55 años experimentan una alta siniestralidad, pero se sospecha que este hecho se debe a la utilización del vehículo por parte de sus hijos, cuyos siniestros son computados a las madres.
Este estudio también indica que es en los lugares costeros donde más índice de siniestros hay. Pontevedra, Melilla, Las Palmas y Vizcaya son las provincias españolas en las que se registra una mayor frecuencia de accidentes graves de tráfico, mientras que Teruel, Soria, Cuenca y Segovia es en las que menos.
Galicia es la comunidad en la que más gasto suponen los accidentes (un 0,9% del producto interior bruto), mientras que Navarra, con sólo un coste del 0, 3% del P.I.B., es la que menos cantidad paga con respecto a su economía.
En cuanto a los accidentes leves, Melilla, Ceuta, Madrid y Vizcaya son las provincias que dominan en la lista, mientras que Teruel, Lugo, Cuenca y Huesca son los territorios con menor frecuencia de siniestros.