- La mayoría de las instalaciones se encuentra en buen estado de mantenimiento, limpieza, seguridad y accesibilidad, aunque fallan en información y servicios
- Las diferencias entre ciudades son notables. Entre las más equipadas, Vitoria, Barcelona y San Sebastián
El deporte no sólo se ve, también se practica. Además, de forma creciente. Las instalaciones deportivas han aumentado en los últimos 30 años más de un 77% y dos de cada tres son de titularidad pública. Su gestión precisa inversión y un buen mantenimiento, algo que se da en las principales capitales del país, aunque lo cierto es que los ayuntamientos destinan una menor proporción de su presupuesto que hace cuatro años. Así lo ha constatado EROSKI CONSUMER tras analizar la dotación de infraestructuras deportivas municipales, y visitar 143 de ellas, en 18 capitales: A Coruña, Alicante, Barcelona, Bilbao, Cádiz, Córdoba, Granada, Madrid, Málaga, Murcia, Oviedo, Pamplona, San Sebastián, Sevilla, Valencia, Valladolid, Vitoria y Zaragoza. La pauta es que, en comparación con un estudio similar elaborado en 2006, la dotación ha aumentado de manera significativa, aunque queda margen para lograr una situación óptima: hay una piscina de media por cada 19.500 habitantes (en 2006 por cada 21.000), un gimnasio por cada 15.600 residentes (hace cuatro años por cada 18.500) y un campo de fútbol por cada 17.700 habitantes (en 2006 por cada 21.300). No sólo ha mejorado la cantidad: la calidad de las instalaciones municipales visitadas es «buena» y apenas un 4% de ellas no cumple con los requerimientos de limpieza, seguridad, accesibilidad y conservación exigidos.
Los 18 ayuntamientos gastan una media de casi 24 millones de euros anuales en deporte (47 euros de media por habitante). El peso de las partidas destinadas al deporte (instalaciones, personal, actividades…) en las 18 ciudades es de un 3,8% de media. Los municipios más volcados con el deporte son: Vitoria (supone una partida del 9,1% de su presupuesto total), A Coruña (5,5%), Valladolid (5,4%), San Sebastián (5,3%), Murcia (4,5%) y Oviedo (4,3%). El resto de ciudades aporta poco más del 3% de sus presupuestos anuales a la inversión en materia deportiva. A la cola se sitúa Málaga (apenas supone un 1,5% del presupuesto total anual de su Ayuntamiento), Zaragoza ( 2%) y Alicante (2,4%).
Desde 2006, el peso de las partidas para el deporte en los presupuestos municipales ha bajado un punto porcentual. Las únicas ciudades que han aumentado su aportación a esta materia han sido A Coruña, San Sebastián y Valencia. Sin embargo, hay otras que han disminuido los presupuestos a la mitad: es el caso de Oviedo (en 2005, la ciudad que destinaba una mayor proporción de dinero, un 8,4%) y Madrid (era la segunda capital que en 2005 destinaba una mayor proporción, un 7,2% de sus presupuestos totales anuales).
Ninguna ciudad puede presumir de tener un equipamiento óptimo, aunque la evolución positiva es generalizada. Pese a ello, los medios desplegados en algunas ciudades son muy superiores a los de otras. En este estudio se comprobó que los residentes de Vitoria, San Sebastián y Barcelona tienen un mejor acceso a la práctica deportiva que los de otras ciudades como Alicante, Granada y Sevilla.
Para los aficionados a la natación, Vitoria es la mejor opción (una piscina por 8.728 habitantes, la mayoría cubiertas), al contrario que Cádiz (una por 63.383 residentes). Vitoria, junto con Valladolid, también destaca en campos de fútbol (uno por 10.000 habitantes). Y la capital vallisoletana sobresale asimismo en canchas polivalentes al aire libre (una por 5.500), muy por encima de Madrid (una por 22.600). Si lo que se desea es golpear la pelota con una raqueta, Granada, Valladolid y Málaga ofrecen más facilidades (una pista por 15.000 habitantes), muy por encima de Alicante (una pista por 30.400 habitantes). Si la raqueta es de pádel, A Coruña destaca muy positivamente (76 pistas para su población).
Sin lugar a dudas, la limpieza y conservación de las instalaciones deportivas visitadas es uno de los aspectos más destacados (valorada con un «muy bien»). Sin embargo, se encontraron fallos en el estado de conservación de un 11% de los 143 equipamientos. Las deficiencias tenían que ver con el mal estado de las redes en porterías, canastas y similares (en un 10% de los casos) y con la falta de una mano de pintura que delimitara correctamente las zonas de juego (en un 12%), así como con la suciedad y mal estado del pavimento de las estancias visitadas (en un 9%).
Asimismo, entre los más de 600 vestuarios analizados, sólo un 2% de ellos precisaban reforma (puertas sin pomo, azulejos rotos, humedades…). La limpieza e higiene también eran adecuadas en la gran mayoría de los vestuarios, sólo un escaso 1% estaba sucio durante la visita.
En seguridad, los resultados fueron asimismo positivos: únicamente el 3,5% de las instalaciones suspende el examen de esta revista (en 2006, esta proporción era del 5%). Sin embargo, en un 14% de las instalaciones no se vieron carteles indicadores de salida de emergencia. En un 4% se observaron elementos que podían poner en peligro la integridad física de los usuarios: pavimentos deteriorados y con fisuras, zonas con una altura considerable y sin vallar, zonas de obras cercanas a las pistas o canchas de deporte, etc. Estas deficiencias se observaron en dos de cada diez instalaciones de Sevilla.
La gran mayoría de las instalaciones deportivas con piscinas contaban con al menos un socorrista en el recinto en el momento de la visita (sólo en un 4% no lo había). Eso sí, en la única instalación que se analizó en Cádiz de estas características, el socorrista se encontraba trabajando en una oficina sin vigilar la piscina.
Pese a la mejora registrada, la información al usuario es uno de los aspectos que peor se cuidan en este tipo de instalaciones. Un 11% contaba con una deficiente señalización, ya que no se sabía dónde estaba cada dependencia o a dónde llevaba cada pasillo. Además, un 45% no informaba sobre las normas de uso particulares de cada estancia, un 36% no exhibía carteles con el horario de apertura y cierre del recinto o de los distintos servicios, por no hablar de que el buzón de sugerencias se encontraba presente sólo en el 38% de los espacios estudiados.
En cuanto a los servicios, tan sólo en una de cada cinco instalaciones había papeleras o contenedores para el reciclaje y el 20% carecía de taquillas en sus vestuarios. Con todo, la existencia de una dependencia sanitaria (bien enfermería o bien botiquín) estaba claramente señalizada en tres de cada cuatro ocasiones.
Aunque prácticamente a todas llega el autobús urbano, el metro, el tranvía e incluso el tren, sólo el 36% dispone de carril bici en sus inmediaciones (la mejor situación se da en Vitoria y San Sebastián).
Un 18% no tiene aseos adaptados para discapacitados (en Oviedo no se vio ninguno) y en un 30% de los casos la entrada al vaso de la piscina no estaba convenientemente adaptada. Además, no había plazas de aparcamiento para discapacitados en las cercanías de dos de cada cinco espacios deportivos (en Alicante y Pamplona, en ninguno). A ello se suma que en un 85% de las visitas no se vio ningún cartel traducido al braille o sobre relieve (Vitoria fue la ciudad donde más carteles adaptados se detectaron).
Ciudad (*) | Información al usuario y servicios disponibles(1) | Estado de mantenimiento y limpieza (2) | Accesibilidad (3) | Seguridad y vigilancia (4) | Nota Final (5) |
---|---|---|---|---|---|
A Coruña | Aceptable | Muy Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
Alicante | Regular | Bien | Aceptable | Aceptable | Aceptable |
Barcelona | Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien |
Bilbao | Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien |
Cádiz | Regular | Bien | Aceptable | Bien | Aceptable |
Córdoba | Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien |
Granada | Bien | >Muy Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
Madrid | Bien | Muy Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
Málaga | Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien |
Murcia | Aceptable | Bien | Muy Bien | Muy Bien | Bien |
Oviedo | Aceptable | Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
Pamplona | Aceptable | Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
San Sebastián | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien |
Sevilla | Aceptable | Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
Valencia | Aceptable | Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
Valladolid | Aceptable | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Bien |
Vitoria | Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien | Muy Bien |
Zaragoza | Bien | Muy Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
Media | Aceptable | Muy Bien | Bien | Muy Bien | Bien |
*. Se visitaron un total de 143 instalaciones deportivas municipales: 20 en Madrid y Barcelona, 10 en Sevilla, Valencia y Zaragoza, 7 en Bilbao y Málaga, 6 en Alicante, Córdoba, Murcia, Valladolid y Vitoria, 5 en A Coruña, Cádiz, Granada, Oviedo y San Sebastián, y 4 en Pamplona.
1. Se han analizado aspectos como la cantidad de información (expuesta y facilitada al usuario) existente en cada instalación, el estado de los carteles y señales indicadoras, etc. Asimismo se ha valorado la variedad y calidad de los servicios disponibles en cada recinto.
2. Se han comprobado aspectos como el estado de mantenimiento, conservación y limpieza de los vestuarios, aseos, duchas, piscina, cafetería, bar o restaurante, etc. Asimismo, se ha valorado el estado de conservación de los equipamientos deportivos (canastas, porterías, redes, etc.), el estado de mantenimiento de suelos y pavimentos, etc.
3. Se ha observado el grado de accesibilidad a las instalaciones, tanto desde el exterior como a las distintas dependencias. Se ha comprobado la existencia de rampas o ascensores que faciliten el acceso, la presencia de aparcamientos reservados para discapacitados, la existencia de grúas en las piscinas, etc.
4. Se han valorado los distintos aspectos referentes a la seguridad en las instalaciones: la presencia de elementos antiincendios (extintores, mangueras, rociadores de agua, etc.), puertas, luces y salidas de emergencia, la iluminación en las instalaciones, la existencia de suelos resbaladizos, la presencia de elementos potencialmente peligrosos, etc.
5. Nota final ponderada de las distintas variables observadas.