Un grupo de investigadores de la Universidad de Lund y la Universidad de Gotemburgo, en Suecia, ha descubierto que una sustancia que se encuentra en la leche materna puede destruir las células cancerosas, según recoge la revista «PLoS ONE». El hallazgo se produjo mientras los científicos estudiaban las propiedades antibacterianas de la leche materna.
Esta sustancia tan especial, conocida como «Hamlet» (Human Alpha-lactoalbúmina Made Lethal to Tomour cells), fue descubierta en la leche materna hace varios años, aunque hasta ahora no ha sido posible probar su eficacia en humanos. Según esta investigación, los pacientes con cáncer de vejiga que fueron tratados con la sustancia eliminaron las células cancerosas muertas a través de la orina después de cada tratamiento, por lo que hay esperanzas de que pueda llegar a convertirse en un medicamento para el tratamiento del cáncer en el futuro.
«Hamlet» está compuesta por una proteína y un ácido graso que se encuentra de forma natural en la leche materna, aunque aún no se sabe con exactitud si la sustancia se forma de manera natural en la leche o puede formarse en el ambiente ácido del estómago de los bebés. Además, «Hamlet» mata sólo las células cancerosas y no afecta a las células sanas. Los experimentos de laboratorio han demostrado que esta sustancia mata a 40 tipos diferentes de cáncer. Los investigadores van a estudiar ahora su efecto sobre el cáncer de piel, los tumores en las membranas mucosas y los tumores cerebrales.
La leche materna destaca por otros beneficios ya conocidos. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), fortalece el sistema inmunológico del bebé y contribuye a mantener una buena salud durante toda la vida, ya que los adultos que fueron lactantes suelen presentar una tensión arterial más baja, menos colesterol y menores tasas de sobrepeso, obesidad y diabetes de tipo 2.