Hay personas que quieren ser solidarias y, sin embargo, no tienen dinero suficiente para hacerse socios o donantes de una ONG. Pero hoy día se puede ser solidario sin gastar dinero: no hay más que dedicar parte del tiempo libre de uno a las personas mayores o con discapacidad, mostrar sensibilidad hacia algunas causas sociales, entregar cosas que ya no se necesitan a quienes sí pueden servirles (ropa, móviles, comida, juguetes) o comer en restaurantes que destinan parte de su recaudación a proyectos de lucha contra el hambre. En este artículo se dan algunas ideas de campañas y acciones solidarias para colaborar con proyectos sociales sin gastar dinero.
Promover y apoyar una causa social
La solidaridad está al alcance de todos. En algunos casos, tan solo supone un minuto y mostrar interés por la vida de otras personas, su realidad y las dificultades que sufren. Basta con reenviar la información de una campaña que se recibe por WhatsApp. Con esta acción ya se está favoreciendo la difusión y que llegue a más gente.
También se muestra sensibilidad y apoyo al colgar en el muro de Facebook, tuitear o cambiar la foto de perfil de WhatsApp por una imagen que hace referencia a una campaña o proyecto. Un ejemplo claro de esto es la campaña «Ni una menos», que ha dado la vuelta al mundo desde Argentina y favorecido que sean más las voces de protesta contra la violencia hacia las mujeres.
Formar parte de la comunidad de Change.org y firmar las peticiones con las que uno se siente afín es otra fórmula de movilización y ser solidario sin tener que gastar dinero. Con una firma se puede contribuir a las peticiones que se hacen al Gobierno de España, la Comisión Europea o cualquier otra institución. Hay peticiones para abrir las puertas a los refugiados, conseguir autobuses más accesibles en la ciudad de Madrid, acabar con las barreras de educación de las niñas en todo el mundo y otras muchas causas.
Comer o cenar en restaurantes solidarios
Puede que uno no se decida a elegir una ONG a la que donar dinero o con la que comprometerse de forma puntual o periódica. Sin embargo, puede que en alguna ocasión se salga fuera de casa a comer o cenar con los amigos o la familia o tal vez todos los días por obligaciones laborales.
Parte del dinero recaudado en el menú de ‘Restaurantes contra el hambre’ se destina a tratamientos de desnutrición
Si es así, se puede escoger una opción solidaria y consultar la red de establecimientos hosteleros que forman parte del proyecto «Restaurantes contra el Hambre» en la que participan casi 900 locales de toda España. Consumiendo en ellos se contribuye a que parte del dinero recaudado a través de los platos de su carta o menú, la ONG Acción contra el Hambre siga trabajando en el diagnóstico, prevención y tratamiento de la desnutrición. Esta iniciativa tiene lugar desde hace siete años y cuenta con la colaboración de grandes cocineros como Joan Roca que respaldan la campaña en diversas autonomías.
Donar ropa, comida, móviles y muebles
Otra forma de ayduar a una ONG y a personas que lo necesitan es donando lo que ya no se utiliza pero puede seguir teniendo uso para otra persona. La ropa, los juguetes y los muebles que están en buen estado son recogidos por diferentes organizaciones.
En el caso de la ropa, HUMANA Fundación Pueblo para Pueblo es una ONGD que desde 1987 promueve la protección del medio ambiente y lleva a cabo proyectos de cooperación en países de África Subsahariana, Sudamérica y Asia. También cuenta con programas de apoyo local y sensibilización en España. La ropa, el calzado y el textil se puede depositar en cualquiera de los 5.000 contenedores que tiene en las distintas comunidades autónomas o en sus 42 tiendas de Barcelona, Madrid, Sevilla y Granada.
Además de las campañas especiales de recogida de alimentos que se hacen fuera de los supermercados, como la Operación Kilo, la Federación Española de Banco de Alimentos recoge alimentos en cualquiera de sus 56 bancos en todo el país.
A través de Dona tu móvil se contribuye al cuidado del medio ambiente porque de cada teléfono se recuperan materiales como el oro, el coltán, la plata o el cobre cuya extracción contamina el aire, la tierra y el agua. Correos ha participado en la recogida de móviles con las ONG Cruz Roja y Fundación Entreculturas, que con los fondos obtenidos ayudan a paliar el VIH entre la población africana.
También se pueden donar muebles o enseres que ya no se tiene intención de utilizar y siguen estando en buen estado, como mesas, sillas, colchones, sofás, electrodomésticos, etc. Se puede hacer a través de distintas organizaciones como Traperos de Madrid Emaús, la Asociación Proyecto Gloria o incluso a través de Cáritas.
Dar juguetes, consolas o bicicletas
Aunque no sea Navidad, hay organizaciones que recogen juguetes durante todo el año para los niños y sus familias que no pueden hacer frente a gastos extras. Compartir los juguetes que ya no emplean nuestros hijos es una forma de prolongar su vida útil y compartir la alegría con otros menores. La Asociación Ningún Niño sin Sonrisa promueve diferentes recogidas, como la próxima el 9 de marzo, donde se puede hacer entrega de juguetes, peluches y cuentos.
En Juegaterapia recopilan consolas, videojuegos o mandos para que los pequeños con cáncer jueguen durante su estancia en el hospital.
Incluso se puede donar una bicicleta que ya no se usa a Bicicletas sin Fronteras, que la reparará y pondrá a punto para entregarlas a los niños de Senegal que la necesitan para desplazarse a la escuela. ¡¡Más de 300 adolescentes se han beneficiado ya de una bici y se ahorran andar entre 4 y 12 kilómetros cada día!!
Regalar tiempo como voluntario
Siempre se puede donar el tiempo y compartir solidaridad con otras personas que lo necesitan. Si se quiere hacer voluntariado hay muchas opciones, desde el voluntariado presencial al online, en verano o a lo largo de todo el año, en el barrio u otra ciudad de España.
También hay voluntariado internacional, aunque este implica tener algo más de dinero para costear el viaje y estar abierto a conocer otras culturas abandonando las comodidades españolas.
Y, por supuesto, es posible elegir entre voluntariado con personas mayores, niños, personas con discapacidad, mujeres, personas sin hogar o en centros penitenciarios.
Existe el voluntariado en familia que favorece que padres e hijos pasen tiempo juntos haciendo un bien social y así transmitir los valores solidarios y compromiso con tus hijos. También se preparan actividades voluntarias para adolescentes, que entregan su creatividad y empatía a la vez que obtienen muchos beneficios como el desarrollo de su autoconfianza, sentirse bien consigo mismos y conocer otros adolescentes con inquietudes similares.