La Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE) ha pedido a las administraciones autonómicas y locales que retiren los badenes que pueden perjudicar la salud de algunas personas y los sustituyan por otros que cumplan la normativa estatal, para evitar perjuicios a las personas con discapacidad o mayores.
El presidente de la organización, Mario García, explicó que los badenes más agresivos lo son para el vehículo y para las personas. «Muchos badenes son perjudiciales para personas con discapacidad o mayores que tienen dolencias graves de espalda o un organismo delicado». Por ello, considera necesario que la normativa estatal sobre badenes se traslade a las comunidades autónomas y ayuntamientos, «dado que acaba de de finalizar el plazo para la adaptación de los reductores de velocidad instalados en las calles».
COCEMFE recordó que la Orden de 23 de septiembre de 2008, por la que se aprobó la instrucción técnica para la instalación de reductores de velocidad y bandas transversales de alerta en carreteras, establece que la altura máxima de los pasos de peatones sobreelevados no puede superar los diez centímetros, mientras que para los del tipo «lomo de asno» la altura máxima permitida es de cuatro centímetros.
Sin embargo, según García, en la actualidad aún hay «una gran mayoría de badenes ilegales en nuestras calles que perjudican directamente la salud de muchas personas durante sus desplazamientos». «Los dos años de moratoria que han tenido las administraciones locales para legalizar sus reductores de velocidad es un tiempo más que suficiente para haberlo solucionado», enfatizó.