En el informe ‘Hacia una deslocalización responsable’, Intermón Oxfam y la Fundación Alternativas presentan un conjunto de propuestas destinadas a las empresas textiles españolas para que su implantación en otros países se realice de una manera responsable. El estudio es el resultado de ocho meses de investigación donde se han analizado las prácticas de empresas españolas en Marruecos.
El estudio es el resultado de ocho meses de investigación donde se han analizado las prácticas de empresas españolas en MarruecosConscientes de que la globalización económica y la liberalización de los mercados lleva a que cada vez más empresas se instalen en otros países en desarrollo, atraídas fundamentalmente por las posibilidades de obtener importantes beneficios, estas organizaciones ponen de manifiesto que muchas veces «este fenómeno se ve acompañado por un impacto económico, social o ambiental negativo, resultante de las insuficientes garantías de protección legal en muchos países del Sur.
En este sentido, el informe recoge las malas prácticas detectadas en las empresas españolas en Marruecos y que afectan a las condiciones laborales de los empleados: imposibilidad de ir al baño en horas de trabajo, de rezar… son algunas de las quejas que se incluyen en el estudio. «Al cliente no le importa si te planificas o si se cumplen los derechos de los trabajadores, porque lo que quieren son las prendas en la fecha de entrega», este es uno de los numerosos testimonios que se obtuvieron de las múltiples entrevistas realizadas a empresarios y trabajadoras de fábricas.
Intermón Oxfam subraya a lo largo del informe la importancia de ofrecer asistencia técnica y financiera a las industrias para que apliquen códigos que protejan los derechos laborales, promuevan los conceptos de Responsabilidad Social Corporativa y compra sostenible, y apliquen la legislación laboral. Y hace referencia a países donde la pérdida de la industria y del empleo es muy importante: Bangladesh, Sri Lanka y, en menor grado, Maruecos. Todos ellos son países que hasta ahora disfrutaban del acceso al mercado garantizado y que ahora quedarán excluidos por las leyes de la competitividad.
El informe ‘Hacia una deslocalización responsable’que ahora presenta Intermón Oxfam es la continuación del que ya presentó en 2004 con el nombre ‘Más por Menos’, donde denunciaba la explotación que millones de trabajadoras sufrían por las políticas comerciales de las empresas textiles. “Las multinacionales del sector textil crean por un lado documentos para garantizar los derechos laborales y, por otro, exigen a sus proveedores plazos de entrega más cortos y pagan cada vez menos por su trabajo”, apunta la ONG en una de sus conclusiones.
Además de Marruecos, donde se sufre la explotación laboral relacionada directamente con muchas empresas textiles españolas, miles de mujeres que trabajan para los proveedores tailandeses de las multinacionales del sector viven en el umbral de la pobreza extrema,
miles de mujeres que trabajan para los proveedores tailandeses de las multinacionales del sector viven en el umbral de la pobreza extrematal y como denuncia la ONG local Thai Labour Camping (TLC). No obstante y a pesar de este panorama tan desolador, propiciado por la “imprevisión de los gobiernos y la industria”, las diferentes ONG que trabajan por que se respete el derecho de estos trabajadores que viven situaciones laborales tan precarias estiman que la situación “no es necesariamente irreversible”. “Buscar y propiciar vías que hagan de estos procesos de deslocalización hacia el Sur un factor de desarrollo para sus economías, medio ambiente o bienestar social, es el reto de cara al futuro”, aseguran.