La muerte de cinco mujeres a manos de sus parejas o exparejas en las últimas semanas son hechos que demuestran que aún hay mucho que hacer ante la violencia de género. Aunque son cada vez más quienes se atreven a denunciar la situación, el número de mujeres que se callan sigue siendo elevado. Cada 25 noviembre tiene lugar el Día Internacional contra la Violencia de Género, con el objetivo de concienciar y erradicar este grave problema. En el artículo se cuenta el origen de esta celebración, la campaña que ha lanzado este año la ONU, las cifras en España que aluden a esta realidad y la importancia de detectar conductas que pueden alertar de las primeras señales de maltrato y cómo denunciarlas.
Día Internacional de la Violencia de Género
El Día Internacional de la Violencia de Género se celebra cada 25 de noviembre para recordar a todas las mujeres que han sido víctimas de este delito y a quienes luchan contra él. Se nombró así en 1981 durante el Primer Encuentro Feminista de Latinoamérica y del Caribe celebrado en Bogotá. Allí las mujeres levantaron la voz para denunciar el maltrato hacia el sexo femenino, denunciando la violencia doméstica, el acoso sexual, la tortura y los abusos sufridos por prisioneras políticas. La fecha elegida fue en conmemoración del asesinato en 1960 de las tres hermanas Mirabal, activistas políticas de la República Dominicana a quienes el dictador Rafael Leónidas mandó matar.
El 35% de las mujeres y niñas sufre alguna forma de violencia física o sexual a lo largo de sus vidas
Este año, la campaña «Únete» de Naciones Unidas, que comienza mañana día 25 y terminará el 10 de diciembre -Día de los Derechos Humanos-, invita a que «pintemos el mundo de naranja» para poner fin a la violencia contra mujeres y niñas. Un año más se quiere denunciar que el 35% de las mujeres y niñas sufre alguna forma de violencia física o sexual a lo largo de sus vidas y que en algunos países esta cifra asciende al 70%. También se quiere recordar que más de 30 millones de niñas menores de 15 años están en peligro de ser sometidas a la mutilación genital femenina y que más de 130 millones ya lo están.
Una grave situación en España
Ha aumentado el número de mujeres que logran salir de la violencia de género
En España, en lo que va de año, 48 mujeres han fallecido por violencia de género. Según la Macroencuesta de Violencia contra la mujer 2015 publicada por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, en el último año el 15,5% de las mujeres residentes en España de 16 y más años afirma haber sufrido violencia física, sexual o miedo de alguna pareja o expareja en algún momento de su vida. Es significativo el aumento de quienes han logrado salir de la violencia de género con respecto al año 2011: son el 77,6% de mujeres frente al 72,48% en 2011 las que han escapado de esta violencia.
Además, casi 9 de cada 10 mujeres han roto el silencio y han hablado con alguien de esta situación, aunque solo el 26,8% de las mujeres acudieron a denunciar su situación a la Policía o la Justicia. Quienes no lo hacen es por miedo, vergüenza de que lo sepa más gente y por no conceder suficiente importancia a la violencia de género sufrida. El 45% de las mujeres ha ido a algún servicio médico, legal o social a solicitar ayuda, pero principalmente lo cuentan a una amiga (54%), su madre (40%), su hermana (32%) o su padre (20%).
En lo que va de año, el servicio telefónico 016, accesible y gratuito para la denuncia de casos de violencia de género, ha recibido 42.232 llamadas. Tras las últimas campañas difundidas desde el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, una dirigida especialmente a la población adolescente y la última lanzada en septiembre bajo el lema “Sí hay salida a la violencia de género gracias a ti. Únete”, las llamadas se incrementaron en un 51,4%.
Existen diferentes situaciones de violencia: psicológica de control, psicológica emocional, económica, física y sexual. Es importante detectar las primeras señales de maltrato que pueden pasar desapercibidas y acabar en una situación de violencia más grave. Algunas de estos signos son:
- Insultos, gritos, descalificación, ridiculización.
- El agresor amenaza con hacer daño, quitar a los hijos en caso de dejarle o exige obediencia.
- Aislamiento de otros amigos y familia, privación de la libertad.
- Control del dinero, la forma de vestir, el teléfono móvil y redes sociales.
- Agresiones físicas: empujones, bofetadas, golpes, pellizcos, palizas.
- Manipulación afectiva.
- Agresión o abuso sexual.
- Forzar a la realización de prácticas sexuales no deseadas.