Varios diseñadores españoles se han unido para crear la «Cinta Solidaria por la Discapacidad», un producto que pretende recaudar fondos para fomentar la formación y el empleo de las personas con minusvalía y sensibilizar a la sociedad de los problemas y necesidades de este colectivo.
Prestigiosos modistos y modistas como Adolfo Domínguez, Roberto Verino, Amaya Arzuaga o Purificación García han cedido sus creaciones para financiar programas de formación socio-laboral para discapacitados, según explicó la presidenta de la Confederación Coordinadora Estatal de Minusválidos Físicos de España (Cocemfe) en Castilla y León, Consuelo Santiago García, una de las organizaciones impulsoras de la iniciativa.
Uno de cada tres discapacitados físicos no tiene trabajo
«Queremos sensibilizar a la sociedad respecto a la problemática de las personas con discapacidad y obtener recursos económicos que nos permitan desarrollar iniciativas sociolaborales dirigidas a este colectivo», añadió Santiago.
Para el otro impulsor de la iniciativa, Francisco Miguel, presidente del Centro Especial de Empleo, Diseño y Gestión de Proyectos Sociales para Minusválidos, la cinta, que tiene un precio de 5,95 euros, además de «muy útil» como accesorio multiuso para llevar el móvil o las llaves, responde a un objetivo fundamental: dar trabajo y dignificar a las personas con discapacidad que la están elaborando.
En España existen más de tres millones y medio de discapacitados, lo que supone una cifra cercana al 9% de la población. Siete de cada diez en edad de trabajar están en paro.
Falta de trabajo y formación
Según los datos que maneja Cocemfe, el 19% de las mujeres y el 14% de los hombres con discapacidad no ha terminado las enseñanzas primarias, lo que evidencia que tienen más carencias educativas que la población en general (entre la que el 11% no ha culminado los estudios básicos).
Los afectados reclaman a las empresas y a la Administración que reserven los puestos que exige la ley para las personas con discapacidad
Una de las vías de trabajo para fomentar la formación e incrementar la integración laboral es la venta de la cinta solidaria, una iniciativa que Cocemfe presentó ayer en Palencia. Durante la presentación se recordó que las empresas de más de 50 trabajadores deben reservar el 2% de sus puestos de trabajo para los discapacitados mediante su contratación o adquiriendo bienes o servicios a través de un centro especial de empleo. Cocemfe lamentó que ni las empresas ni la Administración reservan los puestos que exige la ley para los discapacitados.
La campaña, presentada ayer en Palencia, se llama «Necesitamos tres millones de amigos… ¿Yo también y cada cinta que se venda ayudará a que una persona con discapacidad esté más cerca de encontrar trabajo. Las cintas se venden en centros comerciales, gasolineras y algunos estancos, así como en Cocemfe. Más información, en www.cintasolidaria.com.