El relator especial de Naciones Unidas para el Derecho a la Alimentación, Jean Ziegler, asegura que establecer una moratoria de cinco años para la actual producción de biocarburantes ayudaría a reducir el número de hambrientos en el mundo.
Ziegler afirma además que es necesario consagrar el derecho a la no deportación de las personas famélicas. Próximamente presentará su informe provisional sobre ese derecho en la Asamblea General de la ONU .
En ese foro, el relator para el Derecho a la Alimentación defenderá que el poder alimentarse es un derecho humano básico, ?algo que países como Estados Unidos no consideran?.
Mientras tanto, la hambruna continúa expandiéndose año a año. Se estima que cada día mueren de hambre 24.000 personas en el planeta y 100.000 más por causas relacionadas con la desnutrición. Y ello pese a que, según la FAO, se producen alimentos para alimentar a 12.000 millones de personas, es decir, el doble de la población mundial. «Cada niño que muere de hambre es un asesinato», denuncia Ziegler.
