Imagen: Global Humanitaria
Más de 650 escuelas de ocho países han participado en el primer programa de dotación de juguetes comunitarios y cooperativos para centros escolares puesto en marcha por la Asociación Global Humanitaria en América Latina y Asia. Puzzles, dominós, juegos de mesa, plastilina, pósteres, juegos tradicionales, libros de cuentos, balones e instrumentos musicales son algunos de los juegos y útiles que se han repartido para que en los centros escolares los usen como recursos de refuerzo educativo, dentro del calendario lectivo.
«Tradicionalmente, en Colombia, el proceso de enseñanza-aprendizaje ha sido una tortura por las metodologías que se emplean y los recursos que no están de acuerdo ni con el interés ni con la realidad de los estudiantes»,
«Tradicionalmente, en Colombia, el proceso de enseñanza-aprendizaje ha sido una tortura por las metodologías que se emplean y los recursos que no están de acuerdo ni con el interés ni con la realidad de los estudiantes»explica Augusto Torres, rector de la Institución Educativa Ciudadela Tumac, en Tumaco (Colombia). «Era necesario replantear todos estos procesos con el uso de materiales y metodologías que despertaran el interés de los niños».
Los rectores y coordinadores de las escuelas han participado en la definición de los tipos de juegos didácticos a entregar en cada uno de los niveles y han efectuado propuestas para integrar los juguetes en el calendario académico
La entrega de juegos formativos forma parte de las actividades de Global Humanitaria en el sector de Educación, conjuntamente con otros proyectos como la dotación de material escolar, la construcción y mantenimiento de centros docentes o la formación del profesorado, entre otras actuaciones.
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Así, en los países de América Latina -Perú, Bolivia, Colombia, Guatemala y Nicaragua-cada una de las escuelas ha recibido entre 18 y 25 juguetes educativos distribuidos entre los seis niveles de preescolar, básica primaria y sexto grado, en áreas como la percepción, atención y memoria, matemáticas, lenguaje, geografía, razonamiento y cultura, creatividad y expresión gráfica, y prevención del maltrato infantil. En Asia -India, Nepal y Camboya-, además de a las escuelas, el programa ha llegado también a los siete hogares para niños de la calle que la organización mantiene en estos países, y ha incluido materiales deportivos e instrumentos musicales tradicionales.
“En la campaña sólo hemos incluido juegos de carácter educativo, que realcen la cultura del propio país, evitando juguetes sexistas o bélicos”, comenta la coordinadora de la campaña. “Por un lado hemos intentado que los juegos sean un complemento educativo para los docentes, y además, que a través de esos juegos se eviten comportamientos que desarrollen actitudes sexistas o bélicas”, aseguran desde la ONG.
Solamente en Perú el programa ha alcanzado a 321 escuelas, con un total de 43.685 niños escolarizados. “Estos juegos son recursos que contribuyen a un mejor desarrollo intelectual de los niños, con un proceso de aprendizaje más participativo y dinámico”, según comenta Marcela Ferrari, técnico de proyectos de este país en España.