El próximo día 30 de diciembre saldrá de Barcelona la expedición «Polo Sur sin límites. Obra Social La Caixa», el primer viaje de un grupo de personas con discapacidad que, sin ningún tipo de ayuda externa, va a recorrer 250 kilómetros por la llanura antártica, una de las zonas más inhóspitas y peligrosas del planeta. Los participantes son Jesús Noriega, Xavier Vallbuena y Eric Villalón, que estarán acompañados en la aventura por Ramón Larramendi e Ignacio Oficialdegui, dos guías expertos en esas latitudes.
Demostrar la capacidad de las personas con discapacidad es lo que más les motivó a los tres a la hora de participar en una expedición de alto riesgo de estas características. A Jesús le falta la mano desde su nacimiento; Xavier perdió una pierna hace ocho años, y Eric sólo tiene una visión de un 5%. Después de año y medio de entrenamientos continuados, y recién llegados de Groenlandia, los tres expedicionarios están realizando los últimos preparativos antes de irse al Polo Sur, donde deberán soportar temperaturas de hasta 40 grados bajo cero y vientos catárticos de hasta 300 kilómetros por hora arrastrando un trineo de 60 kilogramos con sus pertenencias.
Actualmente, los tres aventureros se entrenan para llegar a la Antártida en el mejor estado físico y, aún más importante, psíquico. El intenso entrenamiento consiste en «esquiar» por la arena durante dos horas arrastrando un lastre parecido al trineo que llevarán a lo largo de la expedición, correr, realizar ejercicios de fuerza y resistencia dentro de una piscina, y pasar largos periodos de tiempo dentro de una cámara de congelación a 25 grados bajo cero para que el cuerpo se adapte al clima antártico.
La expedición, además de su carácter deportivo, servirá para realizar una campaña científica única en el mundo, ya que por vez primera se tomarán muestras a lo largo de 250 kilómetros del continente austral hasta llegar al Polo Sur geográfico. El análisis de los datos aportará resultados acerca de los niveles de contaminantes orgánicos e inorgánicos, metales, así como sobre la evolución de la vida bacteriana atrapada en el hielo antártico.