Organizar proyectos de voluntariado en verano es una tarea compleja que requiere tiempo. Por este motivo, diversas organizaciones han abierto en enero el periodo de inscripción. La previsión es fundamental para un buen resultado. Se necesita tiempo para formar a los voluntarios, enseñarles las tareas que desempeñarán o el entorno donde vivirán. La preparación es imprescindible.
Aunque parezca que el verano queda lejos, quienes piensen dedicarlo a participar en un proyecto de cooperación deben realizar la inscripción para tomar parte en el periodo previo de preparación. La mayoría de las entidades que ponen en marcha estas iniciativas organizan en los meses previos charlas, reuniones y cursos de formación para garantizar que el tiempo se aprovecha al máximo.
Campos de solidaridad
En enero, Setem fijó las fechas de convocatoria de las reuniones informativas iniciales para asistir a los campos de solidaridad este verano. «Es el primer requisito para poder vivir y compartir la situación de los países del Sur», explica la entidad. La primera reunión tuvo lugar en Madrid el 26 de enero, pero hay otras previstas para los días 12 y 24 de febrero, 5 y 12 de marzo. A éstas le seguirán una entrevista personal y un periodo de formación previa (ciclo de Educación para el desarrollo), que comenzará en abril. La participación en los campos exige haber asistido a una de estas reuniones informativas.
La estancia dura entre tres semanas y dos meses, mientras se colabora en proyectos gestionados por organizaciones locales de los países de destino
La estancia dura entre tres semanas y dos meses, siempre en julio y agosto, mientras se colabora en proyectos gestionados por organizaciones locales de los países de destino. Los costes del viaje (seguro, billete, alojamiento y manutención) corren por cuenta de los voluntarios, que conviven con una de las familias de la comunidad o en un local comunitario. Este año los países donde se podrá colaborar son: Bolivia, Ecuador, El Salvador, Perú, Honduras, Nicaragua, India, Nepal y Etiopía. Allí se desarrollarán proyectos sanitarios, educativos, de comercio justo o de animación socio-cultural, además de actividades de ocio y tiempo libre, comunes en todos los países.
Al regreso, el 8 y 9 de octubre, está previsto un encuentro de seguimiento posterior («¿Y ahora qué?») para compartir con el resto de los participantes las experiencias y los acontecimientos vividos. Las plazas están limitadas, hasta completar el cupo «por riguroso orden de inscripción», y es requisito tener más de 21 años o cumplirlos este año.
En Navarra, el encuentro inicial se celebró a comienzos de enero y la formación se inició el 15 de enero, todos los sábados hasta el 12 de marzo. La formación tendrá una duración de 44 horas repartidas en una decena de monográficos sobre la realidad de los países del Sur, sus relaciones con el Norte o las alternativas a la situación actual, entre otros. Es posible asistir a todos los encuentros o apuntarse a las citas que más interesen. En principio, el cierre del periodo de inscripciones se fijó el pasado 13 de enero, aunque este año se han organizado 40 plazas y permanecerá vigente hasta cubrirlas. Para los monográficos, la inscripción se contempla durante todo el curso, siempre que se avise, al menos, con siete días de antelación. Estos comenzaron el 22 de enero y finalizará el 12 de marzo. El fin de semana del 26 al 27 de marzo se celebrará un encuentro específico sobre las expectativas, reflexiones y actitudes ante el viaje a los campos de solidaridad.
La formación en País Vasco se ha realizado a través del curso «La Realidad de los Pueblos del Sur», organizado en Vitoria y en Bilbao. El curso comenzó en noviembre y diciembre, respectivamente. Quienes asisten al 80% de las sesiones tienen la opción de participar en el denominado fin de semana de campos, «una convivencia donde se desarrollan diferentes dinámicas que nos ayudan a conocer mejor a las personas, para realizar la selección», explica la entidad.
Microproyectos
Imagen: Tulane Public Relations
Quienes prefieran, podrán participar en los Microproyectos de Cooperación al Desarrollo de AIPC-Pandora. Esta organización ha abierto el periodo de inscripción para colaborar en verano en programas en Mali, Sudáfrica, Tanzania, Perú, Marruecos, Ecuador, Uganda, India, Argentina, Guinea Bissau y Brasil. Esta actividad consta de un proceso de preparación y formación durante un fin de semana, que se completa con el trabajo en el lugar de destino y una fase de seguimiento a la vuelta.
Puede tomar parte cualquier persona «con ganas de descubrir y conocer el mundo, tolerante y con un alto grado de interés por colaborar y ayudar a quienes lo necesitan». Algunos microproyectos requieren requisitos específicos, por lo que una vez seleccionado el destino se deben consultar los criterios de cada proyecto. Las personas interesadas deben solicitar a la entidad la ficha de inscripción y enviarla, junto con el currículum y una carta de motivación donde se explique el motivo de la participación. La inscripción se realiza en español, inglés, francés o portugués, en función del destino seleccionado. A continuación, se fija una fecha para una entrevista personal en la sede central en Madrid o en las delegaciones de Barcelona, Bilbao, Sevilla, Granada, Murcia, Alicante, León, Orense y Tenerife.
La plaza se reserva una vez aprobado el expediente. A partir de ahí, comienza la preparación previa a los microproyectos, considerados «iniciativas comunitarias que apoyan acciones de cooperación a pequeña escala». Forman parte de proyectos amplios, aunque los voluntarios participan en una actividad concreta del proceso. Se forman equipos con un máximo de 10 personas, coordinadas por un líder de AIPC-Pandora y un representante de la entidad en terreno.
Mali, Sudáfrica, Tanzania, Perú, Marruecos, Ecuador, Uganda, India, Argentina, Guinea Bissau y Brasil son los destinos
Los microproyectos tienen una duración de 21 días. Durante este tiempo, en Ecuador se llevará a cabo la tercera edición de las colonias de verano con niños indígenas de dos comunidades del cantón Saraguro, para que tengan una alternativa de ocio. En Sudáfrica se desarrollará un programa social de deporte para ayudar a jóvenes de la calle a cambiar sus vidas y una actuación socioeducativa amplia.
Se trabajará con niños afectados por la guerra civil en Uganda, se actuará en un slum en India, se prevé una intervención sociosanitaria y educativa con población albina refugiada en Tanzania, se realizarán tareas en el Banco de Alimentos y en comedores comunitarios de Buenos Aires (Argentina), fortalecimiento de capacidades de producción local en Marruecos, intervención educativa en el centro de acogida de Kanuya y en el orfanato de La Puoponnière (Mali), mejoras en el ámbito educativo del poblado de Gambasse (Guinea Bissau), montaje de un aula informática y actividades recreativas en un centro de apoyo comunitario de la Favela Parada de Lucas (Brasil) y formación de profesores y familiares de alumnos de la escuela Tulio Herrera León de Perú.
Las vacaciones cada vez son más solidarias. Con este nombre se conoce a los programas alternativos, que combinan tareas de voluntariado con tiempo de asueto. Es posible viajar al sur de Tailandia y alojarse con familias locales, mientras se colabora con las tareas habituales y se desarrollan trabajos educativos.
En Costa Rica se ofrece la oportunidad de ayudar en alguna de las cooperativas de la Red Cooprena el Voluntario. Durante dos semanas, se propone compartir su trabajo diario. Del alojamiento se encargan familias locales de la cooperativa, que enseñan el modo de vida tradicional.
Sabática fomenta también las actividades altruistas, a la vez que se aprende de otras culturas y se practican idiomas. Propone un programa de voluntariado en Buenos Aires, en proyectos de educación, hogares para adolescentes y niños, centros de rehabilitación y desarrollo social, cultura, ecología, orfanatos, servicios comunitarios y sanidad. También organiza programas de trabajo social en Costa Rica y numerosas y variadas propuestas de trabajo remunerado y formación.