Imagen: medicusmundi
Mamuca es una mancomunidad que engloba a una serie de municipios del departamento de Atlántida, correspondiente a la zona este de Honduras. La mayor parte de la población que habita esta zona es rural y en la mayoría de los casos no se cubren las necesidades básicas. Los sistemas de salud no están al alcance de todos los ciudadanos, ya que muchas de las comunidades allí presentes deben desplazarse un promedio de una hora para llegar a los centros de salud más cercanos.
Especialmente dura es la situación de la mujer en esta zona por ser, la mayoría de las veces, la más perjudicada, llegándose a hablar incluso de la feminización de la pobreza y de la situación de desventaja que sufren en materia de salud y educación. Por otro lado, el aumento del VIH/sida se acentúa de manera más notable en las mujeres
El aumento del VIH/sida se acentúa de manera más notable en las mujeresque tiene su base, según medicosmundi Bizkaia en la desigualdad de género que éstas sufren. ¿Las razones? La principal es que «las mujeres tienen un escaso acceso a información sobre prevención y educación sexual, sin olvidar los casos de violencia por parte de los hombre y que muchas veces no tienen opción a decidir cuándo, cómo y con quién quieren mantener relaciones sexuales», asegura la ONG.
Hay que tener en cuenta que la mortalidad materna en Honduras es de 110 por cada 100.000 nacidos vivos (en España es de cuatro), y aunque haya disminuido, siguen dándose muertes por causas prevenibles como las hemorragias, infecciones y el VIH/sida. También es destacable el número de mujeres con cáncer cérvico -uterino en la zona, debido al ritmo de vida y a la escasa cobertura de salud que reciben.
Ante este panorama medicusmundi de Bizkaia insiste en remarcar que Honduras posee una Ley de Igualdad de Oportunidades, una Ley de Violencia Doméstica y un Plan de Equidad de Género que incluye todos los aspectos de desarrollo como el de la salud de las mujeres, tanto en el aspecto del acceso a los servicios de salud como en la mejora de la atención a las mujeres y sus problemas específicos en salud. La isla cuenta con un Instituto de la Mujer (INAM) y cada municipio cuenta con una Oficina Municipal de la Mujer, que ofrece un espacio real de participación a las mujeres y de apoyo a los problemas reales que enfrentan, desde su propia sensibilidad.
Principales objetivos del proyecto
El objetivo del proyecto es promover la atención en salud integral a las mujeres en edad reproductiva y sensibilizar a la población en temas relacionados con la desigualdad de género, como es la violencia domestica. Además, con estas acciones se pretende fortalecer las Oficinas Municipales de la Mujer de los cinco municipios y la oficina de Género de MAMUCA. Con este fin, se trabaja de forma participativa, creando en cada municipio comités de salud y redes de apoyo a las mujeres
Se trabaja de forma participativa, creando en cada municipio comités de salud y redes de apoyo a las mujerescoordinadas por las oficinas de la mujer. Así, al final del proyecto habrá una estructura organizada de apoyo y promoción de las mujeres en toda la zona.
Entre las actividades que se realizan, destacan las encaminadas a la atención directa mediante brigadas médicas, que consisten en el traslado del personal sanitario a las comunidades más lejanas para dar cobertura a la población más lejana. Por otra parte, e implicando a la secretaría de salud, se realizan charlas en los colegios con adolescentes y con los padres y madres de familia para abordar temas como las enfermedades de transmisión sexual, la violencia contra las mujeres o la prevención en drogodependencias, que muchas veces tienen relación con el alto número de embarazos no deseados en chicas jóvenes.
“La implicación de los hombres en esta problemática es esencial como agentes transgresores y transformadores que son”, asegura medicusmundi Bizkaia. La sensibilización y la participación de este colectivo tanto en los comités de salud como en los comités de apoyo a las oficinas de la mujer es fundamental; así como la participación de los hombres como padres y compañeros de las mujeres afectadas. Es por esto por lo que las actividades de formación también van dirigidas a ellos.
Poder ofrecer una atención digna en salud a estas mujeres es uno de los logros del proyecto, aunque como explica Ainhoa Oceja, cooperante en la zona, “conseguir concienciar y empoderar a las mujeres sobre su propia salud es para mí el objetivo del proyecto, pero sobre todo, si damos a las mujeres las herramientas para que se empoderen de las decisiones de su propio cuerpo y sus necesidades, habremos dado un gran paso”.