Con motivo de la celebración del Día Internacional contra el Racismo y la Xenofobia, que se celebra este miércoles 21 de marzo, la ONG Red Acoge ha lanzado la campaña «Iguales- Diferentes. La diferencia nos enriquece», con la que pretende sensibilizar a la población en el ámbito de la no discriminación, «para evitar que se produzcan y se toleren actitudes racistas o manifestaciones xenófobas en el seno de la sociedad».
Red Acoge defiende con esta campaña los derechos de las personas inmigrantes y promueve la igualdad de oportunidades a partir del hecho de que «todas y todos somos iguales, es decir, diferentes», el lema esta campaña. La diferencia, sea de género, religiosa, de edad o por origen étnico, «nos define como individuos dentro de una sociedad y nunca puede constituir ni justificar desigualdad de trato que implique discriminación», recuerda.
En el marco de esta campaña se ha publicado un vídeo, que se puede ver en la página web de Red Acoge, con el título «Iguales-Diferentes», que es el resultado de distintos talleres de sensibilización realizados para trabajar de cerca la temática de la no discriminación y compartir experiencias con los distintos colectivos y personas que han prestado su imagen para la campaña.
La Federación Andalucía Acoge invita a la reflexión sobre las actitudes racistas «acrecentadas en la sociedad por las consecuencias de la actual crisis económica». Esta entidad humanitaria insiste «en la gestión de la política sobre inmigración dirigida hacia el reconocimiento de la plena ciudadanía, dentro de una sociedad diversa». La ONG recuerda que la situación de crisis económica global ha tenido como consecuencia un importante aumento del desempleo, los discursos racistas y actitudes discriminatorias hacia el «otro». Esto ha dado paso a la mentalidad de que «si no hay para todos, primero los de aquí», especialmente en materias como la sanidad, la educación o los servicios básicos. «Andalucía Acoge considera negativas todas estas posturas».
El secretario general de Andalucía Acoge, Mikel Araguás, defiende que «la integración del inmigrante hará de la nuestra una sociedad más diversa, un espacio de interculturalidad para el que todavía queda un largo camino». Andalucía Acoge también alerta de la importancia de potenciar un discurso donde se ponga de manifiesto aspectos positivos de la inmigración, así como la apuesta institucional por políticas de integración, educativas y de participación social que suponga el reconocimiento de derechos en igualdad.
Inclusión del pueblo gitano
Por su parte, la Unión Romaní recuerda que el pueblo gitano, junto con la comunidad judía, es la comunidad que más sufre el racismo. Remite a la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, que sitúa al «pueblo rromà» como el más discriminado en el continente, por encima de árabes y judíos.
«Denunciamos que la población gitana sufre discriminación racial en todos los ámbitos de su desarrollo: desde las escuelas segregadas para los niños gitanos en Eslovaquia, hasta las deportaciones masivas que padecimos no hace tanto en Francia, sin olvidar la política de criminalización sistemática a la que nos someten algunos irresponsables líderes municipales en España, pasando por la quema de campamentos gitanos en Italia (hace tres meses en Turín), y los desalojos forzosos en Rumania», denuncia la organización.
La Unión Romaní también incide en que la crisis afecta a la inclusión del pueblo gitano, pues se ha aplicado recortes sustanciales a todos los planes de inclusión gitana que se desarrollaban en muchos pueblos y ciudades. Sin embargo, «estas políticas de apoyo deben ser terminadas, puesto que de nada habrá servido trabajar durante décadas en la inclusión gitana para ahora acabar de cuajo con medidas y proyectos que estaban dando muy buenos resultados».