El informe «Virtual Criminology», encargado por la empresa de seguridad informática McAfee, recoge que cada vez son atacadas con mayor frecuencia las redes informáticas gubernamentales para provocar bloqueos o hallar brechas de seguridad. Sin ir más lejos, este mismo año varios países han denunciado estas prácticas y han acusado sobre todo a China.
El informe asegura que el Reino Unido, país para el que la Red representa la máxima amenaza para la seguridad nacional, ha entrado en una etapa que denomina «ciberguerra fría». «Sabemos que China ha estado tanteando las redes informáticas del Reino Unido. Hace tiempo que están en desarrollo medios para llevar a cabo la ciberguerra. Pero es la primera que vemos que algunos estados han comenzado a aplicarlos», afirma Ian Brown, de la Universidad de Oxford y uno de los autores del estudio.
Así, existe una doble amenaza (por parte de bandas organizadas, así como por parte de algunos estados) para la seguridad de las redes informáticas que controlan sistemas críticos, como las redes eléctricas, el control aéreo, los mercados financieros y otros sectores, según este informe. La propia OTAN reconoce que todos y cada uno de sus 26 miembros han sido objetivo de algún ataque informático, en lo que considera una seria amenaza para la que los países se están preparando desde hace años.
China se posiciona como el país más activo en ese nuevo tipo de espionaje, según el informe, que señala no obstante que otros 120 países utilizan técnicas similares. Aunque desde hace años existen «ciberguerras» en la Red, nunca antes se había acusado tan abiertamente a un país de estar detrás de los ataques y de los intentos de espionaje. A lo largo de este año, países como Alemania o Estados Unidos también han acusado al país asiático de estar detrás de importantes ataques.
Por su parte, China niega las acusaciones y también denuncia ataques contra sus redes, asegurando que ha sufrido «enormes» pérdidas y daños por culpa del espionaje «online», tanto gubernamental como económico e industrial.