Brasil cuenta con un ministro de Cultura un tanto atípico. Se trata del cantautor Gilberto Gil, uno de los exponentes de la canción popular del país que cumple hoy 65 años y cuyas iniciativas al frente de dicho departamento están levantando no pocas controversias.
Su última propuesta ha sido flexibilizar la legislación sobre propiedad intelectual en Internet y defender a los piratas informáticos («hackers»). Tal osadía le ha supuesto el título de «ministro de la contracultura», como le ha tildado el diario británico «The Guardian».
«Yo, como ministro de Cultura y como músico, trabajo cada día con el impulso de la ética ‘hacker'», afirmó Gil, quien subrayó que los piratas informáticos son «militantes de la contracultura que ven en la computadora una fantástica herramienta de comunicación, lo que es precisamente el espíritu inicial de Internet».
Coherentemente con su propuesta, Gil ha anunciado que permitirá que su próxima gira por África y Europa sea grabada y retransmitida de forma gratuita por teléfono móvil. «De aquí en adelante voy a buscar eso con todos mis espectáculos. Se podrán filmar, fotografiar y transmitir por el celular».