El teléfono móvil es uno de los productos de electrónica de consumo que con más frecuencia cambiamos. Tanto es así que la mayoría de los usuarios no pasa más de dos años con un mismo terminal. A ello ayudan la gran oferta que hay en el mercado, los precios a la baja en las gamas medias y la presión de la obsolescencia programada. Algunos componentes del hardware del smartphone pueden haberse quedado obsoletos, como la memoria o el procesador. Sin embargo, otros no necesitan un ritmo de cambio tan rápido. ¿Y si se pudieran actualizar a medida partes de un teléfono móvil igual que se hace con los ordenadores? Un proyecto de Google, el Proyecto Ara, pretende que en el futuro sea haga así, aunque no es la única alternativa en esta dirección, tal y como se detalla en este artículo.
Hace unos años era habitual poder reemplazar la batería del móvil; hoy en día, no
Hace unos años era habitual poder reemplazar la batería del móvil. Hoy en día, este componente está soldado al teléfono y solo es posible su cambio en un servicio técnico oficial. Sin embargo, varias iniciativas y prototipos pueden darle la vuelta a esta tendencia. En la actualidad, existen diferentes propuestas para poder actualizar un terminal por piezas independiente.
Proyecto Ara
Una de ellas es el Proyecto Ara, lanzado por el buscador Google para crear móviles a gusto y medida de cada usuario.
Google trabaja desde hace dos años en este proyecto con el fin para crear una plataforma sobre la cual se pueda configurar un teléfono en función de diferentes módulos. De esta suerte, cada uno de estos módulos podrán ser sustituidos de forma independiente según las necesidades de cada usuario, tanto en aspectos internos de hardware como en otros de diseño y carcasa.
Este proyecto nació dentro de Motorola cuando esta era una empresa de Google. Sin embargo, después de venderla a Lenovo, Google se quedó con el proyecto. Este mismo año se realizará un piloto en Puerto Rico de cara a su comercialización posterior.
Ara se basa en el concepto de hardware libre. Es decir, la información sobre la manera de comunicarse con el hardware, el diseño del mismo y las herramientas utilizadas para crear ese diseño deben ser publicadas para ser usadas libremente. De esta forma se facilita la inclusión de estas novedades por parte de fabricantes y de la comunidad de desarrolladores.
La base del teléfono modular de Google es una plataforma que permite insertar diferentes módulos construidos en metal y conocidos como «endos». El paquete básico cuenta con un marco, un procesador, una pantalla, una batería y un concentrador de ondas wifi.
Ahora bien, entre sus desventajas actuales destaca el peso y tamaño final del dispositivo, con todos los módulos incluidos, así como el coste final para el usuario, ya que resultará más caro que cualquier móvil de gama baja-media del mercado.
Proyecto PuzzlePhone
El proyecto PuzzlePhone funciona con un fin similar al del proyecto Ara. Es un teléfono móvil, pero, a diferencia del sistema de Google, se compone tan solo de tres módulos principales: el primer módulo contiene diversos sensores y la cámara; el segundo incluye la pantalla, el micrófono y los altavoces; y el tercero aporta la batería y otros componentes electrónicos secundarios.
PuzzlePhone verá la luz durante 2015 después de varios años de trabajo. El proyecto está orientado a Android, pero también está abierto a otros desarrolladores de sistemas operativos para móviles como Firefox OS o Windows Phone. Nacido en Finlandia en la misma localidad donde en su día surgió Nokia, pretende crear un mercado de hardware para desarrolladores al presentar una plataforma abierta de desarrollo.
Iniciativa Vsenn
Vsenn es una iniciativa surgida de un exempleado de Nokia
Vsenn es una iniciativa surgida de un exempleado de Nokia y posee su base también en Finlandia. Vsenn promete poner en el mercado un móvil modular que en principio contará con una pantalla de 4,7 pulgadas, aunque fuentes de la empresa no descartan que cuente con varios tamaños más de pantalla, hasta las 5,5 pulgadas. El teléfono constará de tres módulos principales que se pondrán cambiar y actualizar de forma independiente. Los módulos irán definidos por la cámara de fotos, la batería y un bloque central, donde se incluye el procesador y la memoria.
Este teléfono móvil, en principio, estará basado en Android, aunque, al igual que en el caso anterior, también está abierto a otros desarrolladores de sistemas operativos como Firefox OS, Ubuntu o SailFish, para que puedan crear ROM compatibles con el terminal. Aún no se ha confirmado la fecha de salida a producción o comercialización.
ZTE Eco-Mobius y Xiaomi Magic Cube
El fabricante chino ZTE presentó en 2013 un prototipo de teléfono modular denominado Eco-Mobius. Se compone de diferentes piezas a modo de puzzle y permite reemplazar cada uno de sus componentes de forma independiente: desde la cámara al lector de SIM o la unidad de procesamiento gráfico (GPU). ZTE dio a conocer el proyecto con tres tamaños de pantalla: 4,9 pulgadas, 5,8 pulgadas y 7,9 pulgadas. De momento, no hay una clara intención de comercializarlo en fechas próximas.
Otro prototipo disponible es el desarrollado por el fabricante chino Xiaomi, también en 2013. Xiaomi Magic Cube se compone de cuatro módulos principales que pueden reemplazarse de forma independiente: batería, cámara de fotos, pantalla y cuerpo principal, donde se incluye el procesador y los diferentes componentes generales del sistema. Este prototipo de Xiaomi tampoco tiene previsto su lanzamiento como proyecto comercial a corto plazo.