En los teléfonos móviles, el tamaño de pantalla importa. No es un factor obviable por muchos motivos, y no solo por si se ve o no bien un vídeo o una foto en ella. La diagonal de pantalla, o superficie, obliga a un diseño en uno u otro sentido, pero también a unas características técnicas adaptadas a la misma. En un momento en el que la tendencia de los fabricantes es la de diversificar la oferta en distintos tamaños, e incluso ir hacia un híbrido entre el teléfono y la tableta, conviene saber qué medidas de pantalla para el móvil son las que mejor se adecúan a nuestras necesidades.
¿Pantalla grande o pequeña?
El concepto «phablet» ha recobrado actualidad, pero tiene ya un año de recorrido, cuando salieron a la venta modelos como el Galaxy Note de Samsung o el HTC Sensation XL. Aquellos lanzamientos fueron una prueba para ver cómo recibiría el mercado un móvil cuya diagonal de pantalla superara las 4 pulgadas, pero sin llegar a las 7, que son dimensiones ya de tableta pequeña, como el Nexus 7.
Poco a poco el mercado de los smartphones de gran formato se ha ido desarrollando
El resultado fue dispar, aunque no malo, por lo que poco a poco el mercado de los «phablets» se ha ido desarrollado. La última incorporación ha sido el Xperia Z Ultra de Sony, con una diagonal de 6,4 pulgadas y 212 gramos de peso. Pero ¿quién puede necesitar teléfonos tan grandes y pesados? ¿Son fáciles de llevar encima? ¿Qué ventajas suponen?
Pero sin llegar a entrar en el terreno de los «phablets», ¿qué es mejor: un iPhone 5, con su pantalla de 4 pulgadas, o un Galaxy S4, que suma 5 pulgadas? La sensación es que los usuarios reclaman un mayor tamaño en los teléfonos, aunque no todos; los hay quienes aceptan que sea pequeño a cambio de que mejore su portabilidad.
Apple planea ya lanzar modelos iPhone de 4,7 y 5,7 pulgadas, y así competir en todos los frentes
Para curarse en salud, Apple planea ya lanzar modelos iPhone de 4,7 y 5,7 pulgadas, y así competir en todos los frentes. Por su parte Samsung, su principal rival, ha optado por hacer la jugada contraria y diseñar un teléfono, el Galaxy S4 Mini, con una superficie reducida a 4,3 pulgadas, ya que muchos usuarios se han quejado de que la pantalla de la gama S es excesiva. HTC le ha seguido con el HTC One Mini.
Ventajas de una pantalla grande en el móvil
No forzar la vista. La primera ventaja de tener un teléfono con una buena diagonal de pantalla es la ergonomía. Una superficie amplia permite ver el conjunto de una imagen sin tener que forzar la vista y leer letras pequeñas. En una pantalla táctil se puede ampliar el tamaño, pero muchas veces obviamos esta acción.
Comodidad para reproducir vídeos o fotografías. Las imágenes multimedia lucen mucho más en una pantalla de tamaño superior a las cuatro pulgadas, y ver un vídeo puede ser incluso agradable si este no se alarga demasiado. En un iPhone solo se aguanta la visión de archivos de corta duración.
A mayor tamaño de pantalla, mejor se ven las teclas táctiles y mayor precisión se tiene
Mayor facilidad para escribir mensajes y correos. A mayor tamaño de pantalla, mejor se ven las teclas táctiles y mayor precisión se tiene en el pulsado. En consecuencia, se puede escribir más rápido. Esta característica facilita mucho dos de las funciones más importantes de un teléfono, tras el habla: la comunicación por mensajería instantánea y la contestación de correos. Algunos modelos incorporan un puntero óptico que permite que la escritura sea mucho más cómoda.
Mejor experiencia de navegación. En los smartpones ya se pasa más tiempo utilizando aplicaciones y navegando por Internet, que hablando por teléfono. En un aparato de más de 5 pulgadas estas acciones se ejecutan de manera más fácil que en uno pequeño. La precisión de pulsado en los enlaces es mayor, y también la compresión del texto escrito. Permiten, además, ampliar mejor el tamaño de letra sin que el párrafo se descuadre.
Desventajas de una pantalla grande
El peso se dispara. El cristal de la pantalla es uno de los elementos de mayor densidad de un smartphone y, por tanto, a mayor superficie, más peso aportará al conjunto. Las grandes diagonales doblan el peso del dispositivo, que encuentra su medida idónea en torno a los 100 gramos. Con los 178 gramos del Galaxy Note o los 212 gramos del Xperia Z Ultra, la portabilidad en un bolsillo deja de ser cómoda. Es algo que no pasa con los 112 gramos del ligero iPhone 5.
Las dimensiones hacen bulto. Un smartphone más grande, además de pesado, se vuelve más difícil de colocar en un bolsillo de la chaqueta -ya ni pensamos en un pantalón- y obliga a llevar una cartera o una americana, donde sí encajan mejor los «phablets». Pero, ¿y qué hacer en verano?
En una diagonal grande, el procesador trabaja más para dar el óptimo de resolución de pantalla
El procesador se ve más exigido. En una diagonal grande, el procesador trabaja más para dar el óptimo de resolución de pantalla, que en una pequeña. De este modo, hay dos alternativas: o el teléfono tiene un procesador más potente, o da una resolución de pantalla más pobre. Lo normal es que tengan procesadores más potentes y que ello se note en el precio final del aparato, aunque las tecnologías de pantalla de móvil han mejorado mucho en los últimos años.
La batería dura menos. A pesar de que este apartado depende mucho de las características de hardware de cada fabricante, de la tecnología de pantalla que se emplee y de los miliamperios (mAh) de la batería, lo habitual es que una pantalla grande consuma antes los recursos de la batería que otra más pequeña, dado que exige más al procesador y este tiende a calentarse más.
Mayor probabilidad de roturas. Aunque hay que ser cuidadosos con todos los teléfonos de superficie táctil, lo cierto es que si esta es más grande, siempre hay más posibilidades de que en una caída la pantalla resulte dañada.