Un ingeniero francés ha desarrollado un lector portátil que es capaz de traducir textos al braille al momento. Es del tamaño de un ratón de ordenador, pesa 120 g y cabe en la palma de una mano o en un bolsillo.
Raoul Parienti es el creador de este aparato, que ha denominado «Top Braille». Afirma que gracias a él los millones de personas con problemas de visión que hay en el mundo podrán incrementar su autonomía en la vida diaria.
Parienti explica cómo funciona: «Cuando se desplaza sobre un texto, una microcámara numérica escanea cada una de las letras y transmite las imágenes a un procesador que controla una unidad braille».
Esta unidad tiene unas partes puntiagudas que bajan o suben para componer la traducción instantánea al braille de cada letra, tanto si está impresa en papel como en otro soporte (latas, por ejemplo). Con la ayuda de un auricular se puede también escuchar el texto.
El invento cuenta además con un software de navegación que ayuda a los invidentes a orientarse en el texto.
Parienti ha fundado una sociedad para comercializar «Top Braille», que tiene un precio de 3.000 euros. De momento está disponible en francés, italiano e inglés, y en breve en castellano y alemán.