Hace unos días la NASA sorprendió con el anuncio del descubrimiento de siete planetas de tamaño similar al de la Tierra, orbitando alrededor de una única estrella. De acuerdo con esta revelación, tres de esos planetas incluso podrían albergar vida. Pero antes de pensar en la colonización de otros sistemas solares, la agencia espacial estadounidense se plantea un viaje un poco más cercano: la llegada a Marte. El interés por el planeta rojo viene de lejos, con el envío de las sondas espaciales Spirit y Opportunity. Ahora, como parte de las preparaciones para esa histórica expedición, un grupo de investigadores de la NASA ha creado una cúpula que albergará a la futura primera colonia de astronautas en Marte y les protegerá de las radiaciones marcianas con ayuda del hielo. Pero, ¿cómo se vivirá en Marte? En este artículo se dan todos los detalles de este proyecto, que parece casi extraído de una película de ciencia ficción.
¿Cómo vivir en Marte? El peligro de las radiaciones espaciales
Viajar al espacio conlleva muchos riesgos. Si además el trayecto va más allá de la capa atmosférica protectora que envuelve la Tierra, las radiaciones cósmicas emitidas por el Sol y otras estrellas del sistema solar son la amenaza más seria para la salud de los astronautas. Estos rayos pueden atravesar la piel, dañando células y ADN, lo que se traduce en un incremento del riesgo de padecer cáncer.
Los integrantes del programa Apolo (el que llevó a la humanidad a la Luna) ya pasaron por ello, pero estuvieron expuestos solo unas pocas horas -sus paseos por la superficie lunar estaban limitados por esta razón-. Pero en el caso de una expedición a Marte, estos astronautas tendrían que pasar allí varios meses expuestos a las radiaciones. De ahí la importancia de encontrar una estructura capaz no solo de darles cobijo durante su estancia en el planeta rojo, sino también de protegerlos de esas radiaciones de forma eficaz.
Los ingenieros de la NASA han pensado en varias alternativas. Una de ellas sería la construcción de un alojamiento para los astronautas bajo tierra, excavándolo bajo la superficie de Marte. Pero sería un proceso muy costoso, que además implicaría enviar al planeta equipamiento robótico de alta precisión y elevado peso, a fin de construir los alojamientos antes de la llegada de los astronautas.
Por otro lado, la mayoría de materiales que se podrían usar para bloquear la radiación son opacos, lo que haría que la vivienda de los astronautas fuese muy oscura. Y ya puestos a vivir durante varios meses en otros planetas, mejor hacerlo con un poco de luz del sol.
Por eso, la NASA, a través de su centro dedicado a la innovación tecnológica, ha ideado un concepto revolucionario: una cúpula inflable y muy ligera, fácil de transportar y que, además, protege a sus habitantes de las radiaciones cósmicas con un material de lo más simple: el hielo.
¿Qué es la Mars Ice Dome y por qué permitiría la vida en Marte?
Mars Ice Dome (Cúpula de Hielo de Marte) es el nombre que se le ha dado a esta estructura que podría servir de vivienda a los primeros seres humanos que habiten el planeta rojo. La idea vino de un equipo de trabajo en el Centro de Investigación de la NASA en Langley, donde llevan tiempo desarrollando un hábitat que pueda proteger la vida humana en Marte de manera efectiva, usando siempre que sea posible los recursos del propio planeta para minimizar gastos.
Esta estructura en forma de cúpula está rodeada de una carcasa protectora que se rellenaría de agua. Esta agua se congelaría con las heladas temperaturas de la superficie marciana y, por sorprendente que parezca, esa capa de hielo sería suficiente para proteger a los astronautas de las radiaciones cósmicas.
El funcionamiento de este curioso concepto se debe a la presencia de hidrógeno, un material que ha resultado ser muy eficaz en el bloqueo de radiaciones. El agua contiene dos átomos de hidrógeno en cada una de sus moléculas, y una capa de solo cinco centímetros de espesor es suficiente para disminuir los niveles de rayos ultravioleta y gamma hasta niveles seguros.
Mars Ice Dome: ventajas e inconvenientes
La Mars Ice Dome tiene ventajas evidentes respecto a otras soluciones planteadas en la NASA para la construcción de un lugar donde vivir en Marte. Al ser inflable y estar fabricada con materiales ligeros, sería más fácil (y más económica) de transportar hasta el planeta rojo y que unos robots la montaran allí antes de la llegada de los astronautas.
Además, la elección de sus materiales ha sido hecha a conciencia para lograr un resultado lo más agradable posible en términos estéticos. El investigador principal de este proyecto, Kevin Kempton, afirmaba: «Todos los materiales que hemos elegido son translúcidos, de forma que dejan pasar algo de la luz del sol exterior y hacerte sentir que estás en casa, y no dentro de una cueva».
Por último, la Mars Ice Dome también cumple con la premisa de usar materiales que puedan obtenerse en Marte. En este planeta hay muchas áreas que contienen agua helada a poca distancia de la superficie.
El problema es que la estructura requiere de un largo periodo de tiempo para rellenarse por completo por agua: hasta 400 días, a razón de un metro cúbico por día. Esto precisaría que la expedición comenzara a prepararse con más de un año de antelación, a fin de tenerlo todo preparado para la llegada de los primeros humanos al planeta rojo. En palabras de Kempton, «tras meses de viajar por el espacio, cuando llegas por primera vez a Marte y te encuentras con tu nueva casa lista para entrar a vivir en ella, será un gran día».
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Cuando uno ve el diseño de la Mars Ice Dome no puede dejar de encontrarle similitudes con otras viviendas diseñadas en la ficción para los primeros habitantes humanos en Marte.
La Mars Ice Dome recuerda a la casa de Owen (tío de Luke Skywalker) en Tatooine, en la saga ‘Star Wars’. También se parece al cuartel general de Mark Watney en la película ‘El marciano’, basada en el libro homónimo de Andy Weir. Más recientemente, National Geographic ha producido ‘Mars’, una mezcla de documental y serie de ficción en la que se habla sobre las posibilidades reales de una expedición humana a Marte, y se cuenta también la historia ficticia de ese primer viaje, en 2034.
La Mars Ice Dome puede parecer salida de una de estas series o películas, pero sin duda es un paso más de un viaje que la NASA parece tomarse por completo en serio.
