Internet se ha convertido en el medio idóneo para financiar todo tipo de ideas y proyectos mediante el crowdfunding. Existen multitud de servicios de microfinanciación especializados en productos culturales, como música, películas o libros, o iniciativas con fines sociales. Sin embargo, los productos físicos también cuentan con sus propias plataformas o forman parte de una categoría en algunas de las principales páginas webs de crowdfunding. En general, en ellas se permite a creadores y desarrolladores financiar la elaboración de productos únicos o bien lanzar un prototipo viable de una idea o invento. De esta manera, inventores y diseñadores industriales pueden hacer realidad sus ideas. A continuación se detallan las características de las plataformas de crowdfunding de productos físicos y se describen algunas de ellas.
Productos de diseño únicos
Los servicios de crowdfunding cobran una comisión a los impulsores del proyecto una vez este se hace realidad
La gran ventaja de este tipo de plataformas de crowdfunding es que permiten a los usuarios comprar productos únicos o que no forman parte de los catálogos de las grandes empresas del diseño industrial, artístico o la moda. De esta forma, pueden hacerse con una pieza que muy poca gente tendrá, lo que aumenta la sensación de exclusividad y tal vez la cotización del objeto en una posible subasta.
Al igual que en el resto de plataformas de microfinanciación colectiva, es necesario que el producto consiga la mínima financiación fijada por sus promotores para que este se desarrolle. Además, es común que este tipo de productos indiquen una fecha estimada o tope en la cual el artículo se enviará a los usuarios que lo hayan adquirido con anterioridad.
Sin embargo, los servicios de crowdfunding cobran una comisión a los impulsores del proyecto una vez este se materializa, normalmente sobre el valor total del dinero recaudado. Por tanto, parte del dinero destinado a la financiación no puede ser utilizada en su desarrollo, pues se usa para el pago del servicio.
Algunos servicios de crowdfunding interesantes
Quirky es un sitio pensado para inventores, ingenieros y diseñadores que busquen la financiación de algunas de sus ideas. Es uno de los más reconocidos a nivel internacional. El funcionamiento es muy transparente desde el proyecto inicial al desarrollo del producto final. En primer lugar, los usuarios deben subir su idea de producto a la plataforma, para que el resto de la comunidad pueda votarla y opinar sobre ella. Todas las ideas con más de 200 votos pasan automáticamente a ser valoradas por un experto. También es posible buscar ideas similares para unificar esfuerzos en un único proyecto. Una vez que una gana en las votaciones, pasa a la fase denominada «influence», donde la comunidad y los expertos ayudan en algunas etapas esenciales tanto del desarrollo como del diseño: la búsqueda de un nombre, el estilo, la investigación previa, etc. Al final, todos los proyectos desarrollados se ofrecen a la venta desde la página de Quirky de forma permanente.
Nacida en Holanda, Crowdy House permite a los creadores subir sus ideas sobre un diseño industrial o textil: desde muebles, artículos para niños o todo tipo de accesorios. Al igual que otras plataformas parecidas, los artículos solo se fabrican si alcanzan el mínimo de dinero calculado para su creación.
En Fromlab, a diferencia de otras plataformas de crowdfunding, una vez que los proyectos logran sus objetivos pueden seguir vendiéndose a través de la plataforma. Esto hace que los creadores dispongan de un único sitio donde poder hacer realidad sus ideas y, después, servir como escaparate permanente de ventas. Además, Fromlab se encarga de seleccionar los proyectos para financiar, con el fin de asegurar que cumplen unos requisitos previos y que cuentan con garantías de viabilidad como proyecto comercial.
Christie Street está pensada para diseñadores de producto. Una de las diferencias de este servicio con otros similares es que elige antes los artículos que se financiarán, además de que avala su viabilidad. De esta forma, los usuarios tienen más garantías de que el tránsito desde la idea al producto final se realizará de forma exitosa. También ayudan a los creadores a patentar sus ideas en Estados Unidos a partir de 8.000 dólares.
Lanzada por ingenieros y diseñadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), Crowd Supply combina las funciones de una plataforma de crowdfunding con servicios a los creadores para poder desarrollar bien un producto: desde la fase de prototipo al desarrollo, la venta y la logística. A diferencia de otras plataformas de crowdfunding, cuando el producto consigue la financiación mínima, los usuarios pueden comenzar a adquirirlo en preventa hasta su comercialización definitiva.