Desde que el pasado 4 de abril se liberalizara el servicio de información telefónica, que antiguamente cumplía el 1003, son 41 los nuevos números con licencia para ofrecerlo. El problema está en que, en la mayoría, los precios están liberalizados y puede haber una notable diferencia entre llamar a uno o a otro. Además, muchos cuentan con nuevos servicios de valor añadido, como la posibilidad de recibir la información en un SMS, que puede aumentar el precio de la consulta. Las asociaciones de consumidores se quejan de la escasa información que se ha dado a los usuarios.
Liberalización de los servicios
El pasado 4 de abril se liberalizaron los servicios de información telefónica, por lo que entraron en funcionamiento varios números que vienen a sustituir al antiguo 1003 de Telefónica. Estos tienen un coste de llamada muy distinto de una compañía a otra. Tanto que, en algunos casos, puede costar seis veces más llamar a un teléfono o a otro.
Desde que despareció el 1003 comenzaron a funcionar algunos de estos números, por lo que al llamar a éste, en su lugar se oía un mensaje que informaba sobre el cambio y sobre los nuevos números que Telefónica habilitaba para ese mismo uso. Actualmente, tras marcar el 1003, se escucha un mensaje que afirma que ese número de teléfono no existe sin proporcionar información sobre los nuevos.
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha concedido licencias a diversas empresas, por lo que en la actualidad existen 41 números de teléfono de este tipo, aunque la mayoría de ellos aún no prestan el servicio.
Los nuevos números que actualmente están en funcionamiento son los siguientes:
- 11850: (www.11850.com ) La explotación corresponde a la empresa Conduit Europe. El establecimiento de llamada cuesta 0,30 euros y los minutos posteriores otros 0,30 euros cada uno, pero se factura por segundos. Estos precios pueden cambiar si no se llama desde un teléfono fijo. Permite la opción de progresión de llamada.
- 11811: (www.telegate.es ) Es un servicio de información nacional que ofrece la empresa Telegate. El precio de establecimiento de llamada es de 40 céntimos y los sucesivos minutos se cobran igual. El primer minuto se factura completo, mientras que los demás, por segundos. Si se realiza la llamada desde un móvil, los precios cambian: el coste de llamada es menor (12 céntimos), pero los minutos posteriores son más caros, de 75 a 90 céntimos dependiendo de la compañía telefónica de cada móvil. Este servicio cuenta con la posibilidad de conectar con el número directamente cobrando lo mismo que la llamada y tiene la opción de mandar el número de teléfono solicitado por un mensaje corto, correo electrónico y fax.
- 11880: Este es el número de información internacional de la empresa Telegate. La llamada tiene un coste de 60 céntimos y los minutos posteriores de 1 euro. Al igual que en su servicio de información nacional, el primer minuto se factura completo y los sucesivos por segundos. En las llamadas realizadas desde móviles el precio de la llamada es de 12 céntimos y los minutos sucesivos cuestan aproximadamente entre 1,6 y 1,8 euros.
- 11818: Este servicio pertenece a Telefónica, es el sustituto del 1003. El precio de la llamada es de 35 céntimos con posibilidad de realizar una sola consulta. No ofrece servicios de valor añadido. Entre la clasificación de números que aquí presentamos éste es el más recomendable porque la tarifa es la más reducida. Sus precios están regulados, puesto que este número está adscrito al Reglamento de Servicio Universal, por lo que tiene la ventaja de que llamar desde una cabina es gratuito.
- 11822: También de Telefónica. Viene a ser como el 11818, pero con la posibilidad de progresión de llamada, siendo considerablemente más caro que el anterior. El primer minuto cuesta 80 céntimos y los posteriores 40. Permite conectar directamente con el número solicitado, pero con la ventaja que la nueva llamada tiene el mismo coste que si se cuelga y se vuelve a marcar. Es el único número que ofrece de este modo el servicio. Como novedad, este servicio oferta la posibilidad de atender al usuario, además de en castellano, en catalán, gallego y euskera.
- 11825: Este es el número que ofrece información internacional de Telefónica. Viene a sustituir al 025. Tiene un coste fijo de 2 euros por llamada, independientemente de la duración de la misma y de la cantidad de consultas realizadas. Además, permite completar la llamada por un cargo adicional de 60 céntimos.
- 11888: Este servicio corresponde aTPI-Páginas Amarillas, filial de Telefónica. Ofrece teléfonos de ámbito nacional por un coste de 25 céntimos por establecimiento de llamada y 50 por los minutos posteriores en caso de que se llame desde un teléfono fijo. Si se efectúa desde un móvil, el coste dependerá de la compañía que se utilice: en Telefónica Móviles cobra 45 céntimos el establecimiento de llamada y 65 los sucesivos. En otras operadoras los precios son mayores. Este servicio funciona las 24 horas al día, todos los días y cuenta con servicios de valor añadido, como el envío de información vía fax, e-mail o SMS, y la posibilidad de buscar un teléfono por su calle, el código postal o la proximidad geográfica.
A todos estos precios hay que sumarles el 16% de IVA.
Consejos y recomendaciones
Antes de realizar cualquier llamada a estos números es conveniente reflexionar sobre cuál nos interesa utilizar desde el punto de vista económico, ya que las diferencias nos pueden costar hasta diez veces más, tal y como advierte Aurora Tagua, miembro de la Unión de Consumidores de Andalucía (UCA/UCE). Desde la asociación, Tagua recomienda que el usuario se informe bien de las posibilidades que tiene de obtener la información por otros medios, y que sólo se realice la llamada a uno de estos números después de haber agotado otras posibilidades de búsqueda.
Los factores a tener en cuenta son los siguientes:
- Considerar si el número de teléfono que buscamos es de ámbito nacional o internacional
- El número de consultas a realizar
- El teléfono desde el que vamos a efectuar la llamada, si es fijo o móvil
- Evaluar si interesa contratar algún servicio de valor añadido.
Desde la Federación de Consumidores en Acción (FACUA) aconsejan que se haga lo siguiente:
- Si se necesita un número concreto, la mejor opción es bajar a una cabina y llamar desde allí al 11818, ya que es un servicio gratuito. Si no se puede, sigue siendo el teléfono que más conviene.
- En caso de disponer de una conexión a Internet en casa, es preferible buscar el número en la red. Hay distintas páginas que ofrecen este servicio como www.paginasamarillas.com o www.qdq.com.
- Recomiendan, también, que no se haga uso del servicio de progresión de llamada. Es preferible colgar y volver a marcar.
- Además, animan a los usuarios a que reclamen en caso de haber tenido problemas con la llamada. Aunque también critican que estas empresas no tengan la obligación de poner a disposición de los clientes un número gratuito para las reclamaciones.
Servicios de valor añadido
Dentro de los denominados servicios de valor añadido, se engloban distintas opciones que se ofrecen a los usuarios desde estos números de teléfono, como la posibilidad de conectarte directamente con el número solicitado sin necesidad de tener que realizar otra llamada, o recibir la información en un mensaje corto o por un fax.
El problema de estos servicios extra es que algunas veces pueden suponer un coste adicional para el usuario. Por ejemplo, si se solicita un número de la ciudad desde la que se llama y la conexión con él, se paga por esa llamada el precio por minuto de la llamada a un 118, cuando si se colgara el teléfono y realizara otra llamada el coste correspondería al de una llamada metropolitana, llegándose a ahorrar más de la mitad de dinero. Desde la UCA/UCE, Aurora Tagua recomienda que no se acepte la progresión de llamada porque “en la mayoría de los casos no interesa”.
En el caso del 11818, la CMT le prohíbe la prestación de servicios de valor añadido, ya que está incluido en el Servicio Universal, y tal y como notificaron recientemente, podría suponer “el establecimiento de barreras de entrada para los nuevos operadores que quieran prestar sus servicios en este mercado de servicios de consulta, que empieza ahora a abrirse a la competencia”.
Para Rubén Sánchez, vocal de FACUA, la progresión de llamadas cuenta con unas tarifas completamente “abusivas”, por lo que aconseja que sólo se utilice este servicio si se hace a través del 11822, ya que es el único que cobre la tarifa que costaría esa llamada si se cuelga y se vuelve a marcar.
Escasa información
A pesar de ser un servicio que lleva casi 8 meses en funcionamiento, la información que se ha ofrecido a los usuarios ha sido bastante escasa. Ésta es una de las quejas fundamentales de la UCA/UCE. Tagua critica que han surgido muchos números que empiezan por la misma cifra, hecho que despista al consumidor. En su opinión, es un dato relevante porque la diferencia de precios es muy significativa. También apunta que, desde su asociación, han recibido muchas quejas de personas que no se dan cuenta de lo que están pagando hasta que reciben la factura de teléfono en casa.
Desde la Asociación de Internautas, Víctor Domingo defiende que desde que desapareció el 1003, se ha instalado la confusión, la información es nula y cuando no, engañosa y poco fiable. Asegura que por ahora la liberalización del 1003 perjudica al usuario porque la información es la misma, procede de la base de datos de telefónica, pero sale más caro el servicio y el usuario desconoce quién se lo esta dando. “Nuestra queja se centra en que se liberalice un mercado donde predomine la reventa del servicio no se diferencien las distintas prestaciones”. “En resumen, pagamos más por lo mismo”, añade.
Sánchez, por su parte, critica la actuación del Ejecutivo con respecto a la liberalización del 1003. La FACUA cree que no se ha dado la información correcta sobre este cambio “por el afán del Gobierno de fomentar la competencia”. Su reproche es que no haya informado a los consumidores de que el 1003 seguía existiendo, pero ahora como el 11818. Es decir, que no se haya difundido que este número tiene un precio regulado por la Administración.