La tienda de aplicaciones de Apple ha conseguido que se considere normal pagar por un programa para el iPhone o los diferentes iPod, de igual forma que BlackBerry ha logrado lo propio con sus populares terminales de teclado completo pero diminuto. Este hito se ha producido mientras en el mundo de los ordenadores los usuarios se han acostumbrado a utilizar aplicaciones gratuitas, gracias al empuje de la comunidad del software libre y los servicios Web 2.0. Ahora, Nokia apuesta por OVI, una red social reconvertida en tienda que ofrece diversas herramientas interesantes y gratuitas.
Desde el éxito de los mensajes cortos como forma de comunicación, ha quedado claro que los móviles sirven para algo más que hablar por teléfono. Hoy en día, tecnologías como HSPA han aumentado las prestaciones de las redes de datos de las operadoras hasta igualarlas con los accesos de banda ancha. Navegar por Internet desde el teléfono es una realidad, aunque no siempre es barato.
Si un teléfono de una marca tiene más aplicaciones para descargar que otro de la competencia, el usuario, en teoría, se decidirá por él
Esta situación coincide con la proliferación de terminales más potentes y avanzados que se han convertido en miniordenadores. Pero a diferencia de las computadoras tradicionales, en las que se da una concentración de sistemas operativos -sobre todo, Windows, Mac y Linux-, en la telefonía móvil hay más variedad. Este hecho, no obstante, es un obstáculo en el diseño de aplicaciones que funcionen en todos los teléfonos.
Apple desarrolla su propio sistema operativo para el iPhone y Microsoft utiliza Windows en versión Mobile para varias marcas; BlackBerry cuenta con una técnica especial para sus terminales, mientras que otros apuestan por derivados de Linux, como Google con Android. Nokia, el fabricante mayoritario, impulsa Symbian, que también ha sido adoptado por otras marcas.
Con Linux es imposible acceder a las canciones; desde un ordenador con Mac OS X, se puede utilizar un programa puente
Es tal la competencia, que cada fabricante intenta atraer a programadores externos para que creen más valor mediante el desarrollo de programas útiles para quienes usan los teléfonos. De este modo, si el móvil de una marca y con un sistema operativo determinado tiene más aplicaciones para descargar que otro aparato de la competencia, el usuario, en teoría, se decidirá por él.
La puerta a las aplicaciones web
En ese contexto, Nokia ha lanzado OVI, que significa «puerta» en finlandés. Es un portal donde se agrupan diversas aplicaciones web, todas encabezadas por la nueva marca. Esta iniciativa ha tomado características de otros servicios antiguos de Nokia, ahora cerrados para dejarle paso, como MOSH, que servía para compartir archivos, los Nokia Maps o WidSets, que empleaba widgets para mostrar las últimas novedades de los sitios web.
Estos programas funcionan tanto en los teléfonos móviles como en los ordenadores. Se manejan con el mismo nombre de usuario y contraseña, una decisión que aporta agilidad. El sitio se ha traducido al español, entre otros idiomas. Las aplicaciones disponibles en la actualidad son:
Compartir. Recuerda a MOSH, un servicio de Nokia que precedió a éste y que en la actualidad está cerrado. Permite compartir vídeos o fotografías desde el móvil o el ordenador, a través de un formulario o un mensaje de correo electrónico, sin límite de almacenamiento. Aunque se ideara en un principio para enviar las imágenes captadas por el móvil, el tamaño máximo del archivo alcanza los 100 megabytes. Si se desean subir los contenidos desde terminales de otras marcas, se debe utilizar el sitio Shozu.
Mapas. El usuario puede guardar las señas cartográficas de un lugar o los itinerarios y luego sincronizar estos datos en el móvil, si tiene la aplicación del mismo nombre, que suelen incluir los Nokia de gama media y alta. Compite con soluciones como Google Maps o Bing Maps.
Store. Una tienda de aplicaciones donde se pueden encontrar contenidos similares a los del iPhone, Android o BlackBerry, tanto de pago como gratuitos: desde programas hasta contenidos audiovisuales o juegos. También promueve una alternativa a iTunes Music Store, denominada Nokia Music Store, que sólo es apta para los sistemas operativos de Microsoft Windows XP y Vista.
Con una distribución de Linux es imposible acceder a las canciones. Desde un ordenador con Mac OS X, cabe la posibilidad de utilizar un programa puente, que puede resultar bastante incómodo. Este problema de plataforma no se produce, en cambio, en el resto de servicios de la tienda.
La misma comparte rasgos con las redes sociales, como las posibilidades de ver qué han adquirido los amigos o realizar recomendaciones de compra. Este servicio se puede descargar como una aplicación para acceder a ella desde el teléfono móvil.
Archivos. Un disco duro en Internet de 10 gigabytes de espacio permite sincronizar los archivos elegidos por el usuario entre distintos ordenadores (Windows XP, Vista y Mac Os X) y teléfonos móviles. Hay que descargar e instalar un programa en el ordenador.
Correo. Es un servicio de correo electrónico web con un gigabyte de capacidad, al que se puede acceder desde el móvil, con un diseño optimizado para las pantallas más pequeñas, o desde Internet, al estilo de Windows Live Hotmail, Gmail o Yahoo! Mail.
Agenda y Contactos. Su principal característica es que se sincronizan con el calendario integrado en Symbian y realizan una copia de seguridad de los contactos.
Nokia pretende crear una plataforma donde otros programadores contribuyan con sus creaciones y que éstas se vendan a través de su tienda. Supone una apertura similar a la que protagonizó Facebook en el sector de las redes sociales. Entre tanto, la compañía prepara varias aplicaciones, como Lifecasting o Social Messaging. La primera está en fase de pruebas cerrada sólo para terminales N97. Permite escribir y compartir contenidos en Facebook y comunicar la localización física del usuario a través de los mapas de Nokia. Social Messaging se integra con Nokia Messaging y, de momento, posibilita charlar por escrito con los contactos de Facebook.