Una de las características más novedosas de la Web es el enlace, la posibilidad de ver otra página relacionada con sólo hacer clic en una palabra subrayada. Esta opción se utiliza para dar un contexto al artículo y para que el lector amplíe la información sobre temas similares que, en ese momento, no le interesa recuperar para no desviarse del relato. Con frecuencia, los enlaces también se han utilizado para explicar neologismos, tecnicismos o conceptos novedosos que la mayoría de los lectores desconoce. Sin embargo, una nueva tecnología sobrepasa las prestaciones del enlace usado de esta forma: unas ventanas emergentes similares a los webpreviews que ofrecen diccionarios y traducciones casi instantáneas de cualquiera de las palabras de un texto.
Estos servicios proporcionan información adicional sin obligar a que el usuario cambie de pestaña o de ventana
La ventaja de implantar este sistema en los sitios web resulta evidente para sus promotores, ya que pueden proporcionar información adicional sin obligar a que el usuario cambie de pestaña o de ventana, como sucede con el enlace.
En la actualidad, dos compañías se dedican a esta actividad. Semantix, una empresa española fundada por el creador del antivirus Panda, Mikel Urizarbarrena, ha lanzado en fechas recientes Dixio, un diccionario y traductor emergente presente en CONSUMER EROSKI y en medios como Público. Destaca porque funciona con una inusitada agilidad y con un sistema muy sencillo que se puede probar en el texto de este mismo artículo.
Un doble clic en cualquiera de las palabras, aunque no tengan enlace, activa una ventana emergente que se carga sobre la misma página sin precisar de una pestaña o ventana aparte. En ella aparece la definición de la palabra. La rapidez se consigue gracias a un Javascript (pequeño programa insertado en el código general) bastante ligero que no ralentiza en absoluto la carga de la página.
La ventana que surge no impide continuar la lectura y se puede situar en cualquier parte de la pantalla una vez abierta. Resulta muy interesante el hecho de que no sólo reconoce palabras, sino también expresiones. Busca su significado y, si detecta que se desea conocer algún término más enciclopédico, ofrece esa versión. Si se hace doble clic sobre una palabra en plural o sobre un verbo conjugado, el software sabe distinguir la raíz y encontrar la definición de la palabra adecuada.
Diccionarios extras
Dixio dirige esta herramienta, sobre todo, a los sitios y blogs. Instalarlo y usarlo es gratuito, aunque los contenidos mostrados se limitan a una quincena de diccionarios (de inglés, español y catalán), además de otras fuentes como la Wikipedia. Si el usuario desea ampliar las respuestas ofrecidas, puede contratar los diccionarios extra que vende la compañía. Son archivos especializados en ciertos temas, como medicina, o diccionarios que cubren con más profundidad los posibles matices de la lengua.
Un doble clic en cualquiera de las palabras de un texto activa una ventana emergente en la que aparece la definición del término
Por otro lado, los usuarios pueden consultar de forma directa el diccionario y traductor de esta compañía en su web, con el formato de un buscador, o descargarse una aplicación gratuita que se denomina Dixio Desktop. Este programa, diseñado para Windows, realiza la misma función que la aplicación dirigida a webmasters y blogs, pero con todos los programas que tenga activos el usuario en su propio ordenador. Si escribe un documento en un sistema ofimático, puede obtener la definición exacta de una palabra sobre la que albergue dudas. Para ello, debe pulsar la tecla «Control» y hacer clic en el botón derecho del ratón.
Answers.com, la pionera
El otro ejemplo de uso de esta tecnología recae en la empresa israelí Answers.com, que provee desde hace tres años al prestigioso The New York Times y fue pionera en la idea. Para las personas que mantengan sitios o blogs, la integración de Answers.com es gratuita.
Answers.com provee desde hace tres años al prestigioso The New York Times y fue la compañía pionera en el sector
El sistema de funcionamiento se diferencia del de Dixio porque al hacer doble clic no se abre de forma automática una ventana con la definición, sino que surge un pequeño recuadro con un interrogante para confirmar la apertura. Este paso intermedio garantiza que no se abra por error una ventana de definición, pero enlentece el proceso. La ventana emergente no se integra dentro de la página y aparece en otro recuadro distinto, que se superpone a la pantalla que visualiza el usuario.
El servicio de Answers.com sólo funciona con el idioma inglés y ofrece varias fuentes de información en función de la palabra seleccionada. Entre ellas, un diccionario cuyas definiciones contienen archivos de sonido con la pronunciación correcta del término, algo muy útil para los estudiantes de la lengua anglosajona. Además, proporciona los resultados de WordNet, un diccionario que explica las raíces de las palabras y que ofrece sinónimos, enciclopedias y diccionarios científicos.
También dispone de una aplicación para instalar en Windows, que incluye una barra para el sistema operativo y otra para Internet Explorer. Permite, al igual que Dixio, conocer el significado de las palabras que aparezcan en cualquier documento que consulte un usuario en su ordenador, sin importar la aplicación en la que se abra. Firefox también cuenta con su propia barra. A diferencia de lo que sucede en la versión web, para descubrir el significado de cualquier palabra, se debe hacer clic de manera simultánea en la tecla «Alt» y en el botón izquierdo del ratón.