Científicos del «Instituto Politécnico Rensselaer» en Nueva York han desarrollado un dispositivo para almacenar energía: la nanobatería. Ésta es ultraligera, delgada, completamente flexible y podrá adecuarse al diseño más complejo, a los equipos médicos y hasta a los vehículos de transporte, señalaron los científicos en un informe publicado en la revista «Proceedings of the National Academy of Sciences». Además, podrá funcionar hasta a temperaturas de entre 150º centígrados y 73º bajo cero.
La batería se puede enrollar, doblar o cortar en diferentes formas sin que pierda su capacidad generadora. También se puede montar una sobre otra, como una pila de papeles, para aumentar su generación energética.
Y su parecido a una hoja de papel no es casualidad. Más del 90% es celulosa a la cual se han agregado nanotubos de carbono que actúan como electrodos, los cuales permiten la conducción eléctrica y que son los que le dan el color negro.