Las operadoras Telefónica, Orange, Vodafone, Yoigo y Ono han firmado un Código Deontológico para autorregular sus operaciones de televenta, en el que se «comprometen con los usuarios a poner en marcha una serie de buenas prácticas en las llamadas comerciales que realizan?. Las compañías también afirmaron que este pacto, abierto a la incorporación de nuevos operadores, es sólo un primer paso, ya que trabajarán para la inclusión de nuevas iniciativas que implementarán «para fortalecer el compromiso de buen servicio y buenas prácticas con los usuarios».
El acuerdo recoge un conjunto de garantías centradas en la forma, reiteración y control de las llamadas que reciben los consumidores por parte de las operadoras de telecomunicaciones para vender sus productos.
Entre las cláusulas incluidas en el Código Deontológico figura el compromiso de que las operadoras contarán con procedimientos que garanticen que no se contactará con los consumidores incluidos en listas donde se explicita de forma expresa el deseo de no recibir este tipo de llamadas o publicidad. También afirman que no se utilizarán «medios engañosos, fraudulentos ni, en general, desleales para la competencia, para obtener del consumidor datos y/o contestaciones que pudieran interpretarse como una aceptación al cambio de operadora ni para obtener del usuario cualquier otro comportamiento económico».
Cuando un consumidor conteste la llamada realizada por una operadora y manifieste no tener interés por la propuesta, la compañía no volverá a llamar al cliente hasta después de tres meses a partir de esa llamada. Se limita a tres el número de intentos mensuales sobre líneas no contactadas. Además, las operadoras se comprometen no hacer llamadas ni domingos ni festivos, y los sábados también las excluyen a partir de las dos de la tarde. El horario será de 9 a 22 horas de lunes a viernes y el sábado de 9 a 14 horas.
También identificarán el número desde el que se genere el contacto con el consumidor, de forma que el mismo aparezca en la pantalla del terminal. De igual modo, las compañías se abstendrán de utilizar manifestaciones desleales para la competencia.
Otro de los puntos importantes del acuerdo es el compromiso de que facilitarán toda la información que precise el consumidor para tomar una decisión informada, incluidos todos los cargos derivados de la contratación del servicio o producto ofertado.
El Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad valoró de forma positiva esta iniciativa de las operadoras de telecomunicaciones, puesto que supone el reconocimiento de las quejas generadas básicamente por la frecuencia y horarios de las llamadas no deseadas que realizan, así como la necesidad de racionalizar estas prácticas. En ese sentido, animó a las compañías del sector a que avancen en su política comercial hacia los principios señalados en la Ley 29/2009, para la mejora de la protección de los consumidores y usuarios ante la publicidad y la competencia desleal.