El padre de Internet, Vint Cerf, ha dado la bienvenida al IPv6, una nueva versión del protocolo Internet Protocol (IP) diseñada para reemplazar al protocolo IPv4 actual, implementado en la gran mayoría de dispositivos que acceden a Internet. Este miércoles 6 de junio se celebra el World IPv6 Lauch Day (Día del lanzamiento mundial del IPv6), en el que todos los proveedores de Internet van a activar la función IPv6. Cerf ha asegurado que se trata del lanzamiento de «una Internet nueva y de mayor tamaño».
El protocolo IPv6 comenzará a funcionar este miércoles y el considerado como padre de Internet, Vint Cerf, ha explicado el motivo de la aparición de este nuevo protocolo y porque es necesaria la migración del protocolo actual, IPv4, al nuevo. «Imagina un móvil que no pudiera comunicarse con los ordenadores conectados a Internet. No podrías buscar en Google o mandar correos electrónicos. Con el tiempo han aparecido más dispositivos que también necesitan una dirección para conectarse a la web», ha señalado Cerf.
La Red se diseñó en 1973 y se lanzó 10 años después. Durante ese tiempo esta red se consideró como un experimento por lo que se asignó un espacio para direcciones, como números de teléfono, suficiente para definir 4.300 millones de puntos de terminación de Internet, ha indicado Cerf. Por aquel entonces creía que esos miles de millones de puntos no se iban a acabar nunca, pero la cuestión es que el experimento de Internet tampoco se acabó nunca y siguió en crecimiento. En 1996 diseñaron un formato diferente para paquetes de Internet denominado IPv6 que tiene 128 bits de espacio para direcciones, es decir, 3,4 sextillones de direcciones. «Ya hay 5.500 millones de móviles en el mundo. Si todos tuvieran direcciones de Internet, agotaría de forma instantánea el espacio de IPv4», ha asegurado el padre de Internet.
Por tanto, 16 años después no solo se ha agotado el espacio de direcciones IPv4, sino que es necesario implementar el nuevo protocolo para permitir el crecimiento de la Red, ha confirmado Cerf. Si no se adopta IPv6, se agotará el espacio de direcciones IPv4 y los usuarios no podrán acceder a Internet porque no tendrán direcciones que puedan utilizar, lo que supone que Internet dejaría de crecer. «Si en 1973 hubiese sabido lo que iba a pasar en 2013, hubiese insistido en crear un espacio para direcciones mucho mayor para haber evitado pasar por esta migración», ha afirmado Cerf.