Internet ya se ha subido al automóvil, aunque de un modo que, a priori, no era el esperado. En lugar de contar con un punto de acceso integrado en el coche, el usuario accede a la Red a través de su teléfono móvil. Mientras está en marcha, y siempre que tenga buena cobertura, puede sacar provecho de Internet a través de una serie de aplicaciones descargables que también rentabilizan el navegador GPS del teléfono o el acelerómetro, cuando los haya. El objetivo es claro: hacer la conducción más fácil, cómoda y ecológica.
Para conseguirlo, algunas de las aplicaciones descargables que se pueden utilizar son las siguientes.
Dashcomand. Se basa en los datos que emite un dispositivo que se vende en Estados Unidos, denominado PLX-Kiwi Wifi, que consiste en una caja de sensores que se puede conectar en el puerto del coche OBD-II. No todos los modelos disponen de este puerto de conexión, pero es muy frecuente en los coches de control electrónico. En él, los mecánicos conectan los aparatos de diagnóstico. Kiwi Wifi recoge datos del estado del motor o el consumo y los facilita al usuario particular vía wifi. Las aplicaciones como Dashcomand están pensadas para analizar esta información.
Rev. También se fundamenta en las informaciones que le pasa PLX-Kiwi Wifi. Analiza la velocidad del vehículo, las aceleraciones, la temperatura del motor, la presión de los frenos, el estado del refrigerante, etc. En función de los mismos, aconseja una conducción más racional, avisa de la necesidad de revisiones, etc.
Dynolicious. Es similar a las aplicaciones que funcionan con PLX-Kiwi Wifi, pero se apoya en la combinación del acelerómetro del teléfono con el navegador GPS para calcular todos los datos necesarios y asesorar sobre el estado del automóvil y sobre la mejor forma de conducir. Está disponible para iPhone por 10,49 euros.
Harry’s LapTimer. Este ambicioso desarrollo aprovecha el navegador GPS y el acelerómetro del iPhone para recoger hábitos del conductor sobre sus viajes, la frecuencia de estos, la velocidad media, etc. Deberá encenderse la aplicación cada vez que se conduzca. Su precio es de 8,99 euros en la App Store.
Axa Contigo y Direct Seguros Móvil. Son dos aplicaciones de iPhone exclusivas para el mercado español, lanzadas por las compañías Axa y Direct Seguros. Ambas están pensadas para facilitar las gestiones sobre el terreno cuando se registra un accidente y hay que reclamar y dar parte. Facilitan la comunicación del siniestro, la gestión del papeleo e, incluso, la petición de un automóvil sustituto o un taller, si fuese necesario. Todo este proceso se realiza a través de Internet.
Atasco.org. Aunque no es estrictamente una aplicación, sino una página web, es un servicio muy útil para los conductores que transiten por las carreteras de todo el territorio nacional. El sitio web está diseñado para ser compatible con todas las marcas de smartphones e informa de las zonas cercanas a la posición del conductor donde hay atascos.
Find my car lite. Esta aplicación para teléfonos con el sistema operativo Android localiza el coche después de aparcarlo. Es muy útil cuando se estaciona en grandes centros comerciales con enormes aparcamientos. El sistema funciona mediante la brújula del teléfono y el uso de Google Maps. La pantalla indica la dirección que debe tomar el usuario para dar con su coche, además de informar de la hora a la que se aparcó y la distancia a la que se encuentra de él.
Mileage. Sirve para controlar el gasto mensual en gasolina. Se introducen los datos de gasto, volumen y kilometraje cada vez que se reposta. Con ellos, elabora gráficos mensuales y anuales. Solo para Android.
Waze. Es un GPS comunitario que se crea entre una red de usuarios. Estos marcan las diferentes incidencias que detectan, para que otros contactos puedan verlas y planificar su ruta en función de ellas. Waze también controla el tiempo que se tarda en realizar una ruta y, si lo estima elevado, pasa un aviso de «tráfico lento» a la comunidad. Está disponible para iPhone, Android, Nokia y Blackberry.
Gasolineras España y Gasofa. Ambas sirven para conocer las gasolineras que tiene el usuario alrededor, las marcas y los precios de cada crudo. La primera es compatible con Android y la segunda, con iPhone. Para informar, se apoyan en sus bases de datos, el navegador GPS y los mapas de Google Maps.
Ford Sync es la principal novedad en materia de interacción entre el automóvil y las aplicaciones para smartphone basadas en la web. Este sistema operativo pensado para regir los controles de los coches lo incorporará la marca Ford en sus futuros modelos. El sistema emitirá vía Bluetooth y wifi todos los datos de los sensores del vehículo y aportará información acumulada de su GPS interno sobre rutas, velocidades de desplazamiento, etc. Todo ello para que los usuarios puedan analizar sus datos con el móvil y tomar decisiones. Ford Sync también permitirá controlar tanto el teléfono como otros elementos electrónicos por voz, de modo que el conductor no tenga que soltar el volante. Se prevé que el primer modelo que cuente con él sea el Ford Fiesta, que se comercializará en 2011. También está previsto que el sistema aporte a los ocupantes del vehículo un punto de conectividad wifi para sus móviles y portátiles, según ha anunciado Ford.
Por otro lado, el Chevrolet Volt será compatible con el sistema operativo para móviles Android y así permitirá una gran cantidad de aplicaciones. El conductor podrá buscar direcciones en Google Maps mediante la voz, localizar el coche por GPS, controlar desde el teléfono la carga de batería -es un vehículo híbrido enchufable- o el cierre centralizado, etc.