En los últimos meses, y desde distintos frentes, ha vuelto a hablarse de la muerte del ordenador tal y como se conoce; éste sería sustituido por una multitud de aplicaciones ejecutables desde el navegador. Lo cierto es que ya existen algunas aplicaciones web muy populares, como las cuentas de correo de Yahoo! y Hotmail, o las páginas del tipo Del.icio.us y Flickr, pero no son las únicas.
Aplicaciones para comunicarse, informarse y compartir
Aunque éstas no dejan de ser predicciones todavía por cumplirse, lo cierto es que en los últimos tiempos se ha producido una proliferación, y una mejora extraordinaria, de las aplicaciones que se ejecutan desde el navegador y que se localizan en servidores remotos y no en el disco duro del usuario. Para Enrique Dans, profesor del Instituto de Empresa y sociólogo de las nuevas tecnologías, la explosión de las aplicaciones web es una de las características que mejor definen el fenómeno de la Web 2.0.
No cabe duda de que la comunicación y la información son dos de las actividades a las que los usuarios dedican más tiempo y esfuerzos. La primera de ellas se ha visto enormemente favorecida, entre otras cosas, por la explosión de los programas de mensajería instantánea. Exceptuando a Yahoo! Messenger y MSN, el resto de los servicios (o clientes) de mensajería instantánea requieren la instalación de un programa en el ordenador del usuario para poder funcionar. Sin embargo, existen dos excepciones que permiten ejecutar estos programas desde el navegador, con la consecuente ganancia en rapidez en el proceso de activación: Meebo y Gtalkr. Además, uno de los programas es transversal: esto es que puede poner en contacto a usuarios de distintos clientes de mensajería, cosa más complicada de hacer utilizando aplicaciones de escritorio, pues hay que instalarse los clientes multiprotocolo.
Meebo permite acceder a los servicios de mensajería de AOL, Yahoo, MSN y Google. Gtalk proporciona únicamente acceso a Google Talk, el cliente de mensajería instantánea de Google, y permite además visualizar los últimos correos recibidos en la cuenta de Gmail. Para usar ambos, no hace falta nada más que introducir el nombre de usuario y la contraseña con la que se accede habitualmente al servicio de mensajería en el que uno está dado de alta.
Separar el grano de la paja
El exceso de información es, por otro lado, uno de los grandes problemas a los que deben enfrentarse los navegantes, que se las ven y se las desean para separar el grano de la paja y acceder únicamente a la información de su interés. La aparición del formato RSS (Rich Site Summary), que permite seleccionar noticias en un directorio expuesto de manera sencilla y clara, ha facilitado las cosas al permitir a los usuarios acceder a fuentes automatizadas y personalizadas de información. A partir de este formato, basado en el versátil lenguaje de programación XML, se han desarrollado los agregadores, o lectores (‘news readers’), de blogs y de noticias, muy útiles para que el internauta se haga su listado de informaciones ‘a la carta’. El más conocido es Bloglines, pero hay otros.
Entre los últimos lectores de noticias en aparecer en la Red, dos de los más interesantes son Findory y Rojo. El primero es especie de servicio personalizado de noticias que, además, aprende en función de los intereses informativos del usuario (no en vano algunos de los desarrolladores del programa colaboraron en el proyecto del servicio de recomendaciones de Amazon). Para acceder a él ni tan siquiera hace falta registro. La única pega que puede ponérsele es que hasta la fecha sólo incluye medios en inglés, aunque pronto piensa expandirse a otros idiomas.
Por su parte, Rojo es un agregador fácilmente personalizable que permite escoger fuentes de información entre una abundante lista de categorías y medios preseleccionados y al que, además, se pueden añadir todos los medios de comunicación que se deseen. Similar a estos últimos, pero con más hincapié en la participación, es CommonTimes, un lector que, además de bucear en docenas de publicaciones, permite crear noticias propias y compartirlas, vía sindicación RSS, con amigos o con el resto de la comunidad.
Servicio de envíos urgentes online
Hasta hace bien poco bastaba con un sólo mensaje cargado de Megabytes para colapsar un buzón de correo electrónico, especialmente en el caso de los servicios de correo online, como Yahoo, Hotmail y similares. La llegada de Gmail, el cliente de Google, hizo que se multiplicara la capacidad de almacenamiento de estos servicios.
Pero aun así, enviar ficheros de gran tamaño por medio del correo electrónico sigue siendo un procedimiento lento e inseguro. Es por ello que ha aparecido toda una constelación de herramientas gratuitas para facilitar el intercambio de ficheros voluminosos. Permiten al usuario subir el fichero a los servidores de la aplicación, generando un enlace que el destinatario utiliza luego para identificar y descargarse el fichero. Entre los más conocidos destacan los siguientes:
- Yousendit: Permite subir ficheros de hasta 1 Gigabyte. Los ficheros se borran bien a los siete días o bien cuando se hayan realizado 25 descargas del mismo fichero.
- Megaupload: Permite intercambiar ficheros de hasta 250 Megabytes, si bien tiene un servicio de pago que eleva esta cifra hasta los 5 Gigabytes. Los ficheros permanecen en los servidores y sólo se borran si ha pasado un mes desde la última descarga.
- Rapidshare: Acepta ficheros de hasta 100 Megabytes, que suben hasta los tres Gigabytes por día si se hace uso de una cuenta ‘Premium’, que es de pago. Al igual que Megaupload, premia con puntos (intercambiables por cuentas con características ‘Premium’ pero gratuitas) a aquellos usuarios cuyos ficheros sean descargados muchas veces y borra los ficheros que no han sido utilizados en un plazo de 30 días.
- Dropload: Permite subir ficheros de hasta 100 Megabytes, que en este caso sólo puede descargar una única persona. Si al cabo de siete días el fichero no ha sido descargado, éste se borra.
- Turboupload: Aunque está todavía en fase beta, permite intercambiar ficheros de hasta 70 Megabytes.
Aplicaciones de oficina
Cada vez que se habla de la posibilidad de disponer de un WebOS, o sistema operativo basado en la Red, se renuevan también los esfuerzos por diseñar aplicaciones web que puedan competir con los programas más populares (Open Office y, sobre todo, Microsoft Office) entre los usuarios en lo que a ofimática se refiere: procesadores de textos, de tablas, de gráficos…
Si bien hasta la fecha los esfuerzos siguen siendo baldíos, últimamente se han lanzado distintas aplicaciones web que, por una vez, no tratan simplemente de replicar las prestaciones de un Word o un Excel, y que resultan una alternativa interesante para quien no dispone de estos programas:
- Writely: Se trata de un procesador de textos, en fase beta, al que se accede por medio del navegador y que incluye ciertas características especiales, y mejor adaptadas a la naturaleza de la Web, como son la posibilidad de compartir un documento con otras personas (a las que también pueden otorgárseles privilegios de edición) mediante un enlace generado, la capacidad de etiquetar los documentos, de guardar las sucesivas versiones o de publicar los textos en un blog.
- ZohoWriter: No es muy distinto de Writely, si bien sólo permite grabar los ficheros en formato Word, PDF o SXV (el formato de Open Office), mientras que Writely también puede comprimirlos en Zip o grabarlos como un fichero de RTF. Por otro lado, en el caso de Zoho Writer los ficheros se comparten por medio del correo electrónico y no de un enlace generado directamente.
- NumSum: Se trata de una hoja de cálculo. Al igual que las anteriores aplicaciones, permite crear documentos a los que se les asigna una URL que a su vez se pueden intercambiar con otros usuarios. Acepta también etiquetas (‘tags’) y es fácil de usar si bien, al contrario que los procesadores antes mencionados, no permite importar otras hojas de cálculo del ordenador y tiene unas opciones de exportación limitadas.
- Goffice: Es un proyecto de ‘suite’ (caja, grupo) de aplicaciones integral, que todavía está en fase de desarrollo. El procesador de textos, la única de las aplicaciones que está totalmente desarrollada, permite crear documentos de texto en formato PDF que luego se pueden guardar o bien enviar por correo o incluso por fax (aunque por ahora sólo a EEUU).
- Thinkfree: Sus vertientes más notorias son su gran parecido con las ‘suites’ ofimáticas de escritorio existentes y su buen funcionamiento. Se trata de una ‘suite’ multiplataforma (que acepta diferentes sistemas operativos) desarrollada en el lenguaje Java que ofrece, además de la versión descargable de pago, una versión web gratuita con tres aplicaciones (Write, Show y Calc) y una carpeta de 30 MB en la que guardar los documentos de texto, las hojas de cálculo y las presentaciones. Estos archivos se pueden luego bajar al disco duro o enviar a otros destinatarios.
Copias de seguridad
Aunque no son aplicaciones web desde un punto de vista estricto (pues todas ellas requieren la instalación de un pequeño programa en el PC), también merece la pena reseñar algunas aplicaciones que permiten hacer copias de seguridad de ficheros del ordenador para luego almacenarlos en servidores remotos.
- Mozy: Todavía está en fase beta. Permite almacenar hasta un Gigabyte de información (dos Gigabytes si se rellena una encuesta) de forma gratuita, a cambio de un envío publicitario. La herramienta permite acceder a los ficheros del disco duro bien por categorías personalizadas (incluyendo una carpeta de los enlaces favoritos guardados en Internet Explorer y Firefox) o bien del modo tradicional. Esto es: según el lugar en el que están almacenados. Así, se le puede pedir a Mozy que haga una copia de seguridad de todos los ficheros que importantes para el usuario de forma diaria, semanal o simplemente cuando no se esté usando el ordenador.
- Gmail Drive Shell Extension y Gdisk: El primero funciona en Windows y el segundo en Mac OS, pero ambos se sirven de un mismo truco: convierten cualquier cuenta Gmail, que ya supera los 2,6 Gigabytes de capacidad, en un disco duro virtual. En el caso de Gmail Drive Shell, el programa de descarga crea una nueva unidad de disco en el PC, a la que se pueden arrastrar los archivos y que se envían automáticamente a la cuenta de Gmail en forma de correos electrónicos. Gdisk opera de forma parecida, si bien presenta un interfaz algo más avanzado. Ambos son muy útiles (ya que no hay que estar adjuntando y enviando ficheros de forma manual cada dos por tres), pero están bajo el punto de mira de Google, que los bloquea cada cierto tiempo al identificarlos como usuarios ‘no humanos’ y considerarlos potenciales productores de correo basura.
La importancia de llamarse Ajax
Parte de la culpa de que las aplicaciones web sean cada vez más parecidas, en calidad, a las aplicaciones de escritorio (las que se activan desde el PC) hay que atribuírsela al desarrollo de Ajax. Este nombre engloba a toda una amalgama de tecnologías que se utilizan para el diseño y desarrollo de programas interactivos.
La principal ventaja de las aplicaciones realizadas con estas tecnologías es que se actualizan de forma dinámica, sirviéndose casi siempre del lenguaje XML, y no mediante el ‘refresco’ de páginas enteras que se muestran al usuario cada vez que éste realiza alguna acción.
Por esta razón, las aplicaciones desarrolladas en base a Ajax son más rápidas que las herramientas web anteriores a la aparición de este lenguaje de programación. Esto se advierte fácilmente, por ejemplo, al utilizar Google Maps. El programa nos permite acercar o alejar la imagen, arrastrar el mapa, etcétera; todo ello de forma casi instantánea.
El desarrollo de Ajax ha permitido que Internet haya ido poblándose en los últimos meses con aplicaciones cada vez más prácticas y funcionales y que han sido desarrolladas por pequeñas compañías y no por gigantes de la talla de Yahoo, Google o Microsoft.
Algunas aplicaciones basadas en Ajax
- Netvibes: Es más parecido a una página personal que a un agregador, o lector de noticias, aunque su función última sea sindicar contenidos. Se trata de una aplicación de origen francés construida con las tecnologías de Ajax que va recortando terreno, como preferencia entre los internautas, a otras aplicaciones de escritorio similares como Bloglines o MyYahoo. Todo ello gracias a su diseño en forma de módulos independientes y a las posibilidades que ofrece para personalizar los contenidos y los servicios favoritos. Es muy similar, conceptualmente, al nuevo Windows Live de Microsoft.
- Protopage: Es una aplicación que también utiliza Ajax y que permite crear una página personal a la medida del usuario con accesorios de gran utilidad, como una lista de tareas o de enlaces de uso frecuente.
- Suprglu: Se trata de un sencillo y manejable agregador que permite juntar en una sola página el contenido del gestor de favoritos Del.icio.us, la herramienta de organización y gestión de fotos Flickr, el editor de blogs Blogger y hasta de una docena de sitios distintos. Todo ello con la estructura visual y cronológica que tienen los blogs