El sistema de patentes se inventó como una forma de proteger las innovaciones comerciales frente a infractores y la competencia desleal, que podría copiar fácilmente un producto sin haber invertido en su desarrollo. Este modelo, que en Europa solo se utiliza para la protección de innovaciones físicas, en Estados Unidos también se extiende al software. Esto supone un problema de envergadura para muchas empresas, ya que programas antes comunes al desarrollo tecnológico se han patentado ahora por empresas como Apple, Google o Microsoft, que los usan como un arma más para desactivar a sus competidores en las nuevas guerras comerciales desatadas por la revolución de los móviles inteligentes. Al final el gran afectado es el consumidor, que ve la innovación y la oferta de precios mermada, con tendencia a peligrosos monopolios.
Es famoso el caso de la patente de Amazon para la compra on line a través de un único clic de ratón, que levantó polvareda por lo absurdo de la licencia, pero no es el único ejemplo. Hace unas semanas Appleconsiguió bloquear la venta de varios modelos de teléfonos Samsung en Europa gracias a que había comprado la patente de ciertos programas de funcionamiento comunes en muchos teléfonos. Mientras el caso está en revisión, muchos usuarios ven cómo la oferta de modelos empequeñece.
Una amenaza al mercado libre
Esta situación, que constituye una amenaza al mercado libre, ha llevado a líderes del software libre y los ciberderechos a posicionarse en contra de las patentes de software, debido a que los programas patentados en los últimos tiempos son caminos lógicos y necesarios en cualquier tipo de procedimiento y desarrollo de las nuevas tecnologías. Según estos activistas, es como intentar patentar el oxígeno en un determinado país para impedir que exista vida en él y que no haya desarrollo comercial que nos amenace.
Uno de los ejemplos más destacados de lo que ocurre cuando no existen este tipo de patentes es el desarrollo de Internet
Uno de los ejemplos más destacados de lo que ocurre cuando no existen este tipo de patentes tan restrictivas es que el crecimiento y desarrollo de nuevas tecnologías se dispara y alcanza niveles impensables. Internet, creado en el estamento militar y luego en el universitario, ha crecido de forma exponencial gracias a que sus principales protocolos y tecnologías han sido donadas al dominio público o utilizan alguna licencia de uso poco restrictiva.
La compra de patentes no se limita a las guerras empresariales, sino que puede ser una fuente de beneficios seudolegales para muchos profesionales, sobre todo abogados pero también ingenieros, desaprensivos. Los abusos al sistema de patentes por parte de bufetes de abogados han generado el adjetivo «patent troll» para definir a quien vive de los pleitos debidos a las patentes. Un exejecutivo de Sony ha denunciado a Nintendo por infracciones de patente en la pantalla de la consola 3DS, cuando la fabricación y el desarrollo de esta tecnología está, se supone, en manos de la empresa Sharp, con quien Nintendo tiene un acuerdo en vigor. Si la denuncia prosperase, la venta de la consola 3DS podría bloquearse, con el consiguiente detrimento para los consumidores.
La batalla del móvil
Es en el sector de la telefonía móvil y las tabletas donde en los últimos años se han recrudecido estas prácticas, ya que casi la totalidad de las empresas más relevantes se encuentran en pugna entre ellas por la infracción de alguna patente. Es un sector de un espectacular crecimiento en los productos de electrónica de consumo y se ha convertido en la principal puerta de entrada a Internet por parte de muchos usuarios. De cara al futuro, la empresa que domine el mercado dominará todo el sector tecnológico, un pastel jugoso con muchos, demasiados, novios-Microsoft con Windows Phone, Google con Android, Apple con iOs, etc.-, donde las patentes juegan un papel principal.
Esta batalla ha llegado a extremos grotescos, como sucedió cuando Apple bloqueó la venta en Europa de la tableta de Samsung
Esta batalla ha llegado a extremos grotescos, como sucedió con Apple y Samsung a raíz de algunas patentes relacionadas con las tabletas. En Europa, Apple logró en agosto bloquear judicialmente la venta de la tableta de Samsung, Galaxy Tab, aunque al final la medida se levantó. La tableta, que utiliza el sistema operativo Android, es uno de los principales rivales en el mercado del iPad, la tableta de Apple.
La disputa comenzó en tribunales de Estados Unidos, donde Samsung, entre otras argumentaciones, ha utilizado una secuencia de la película «2001, una Odisea en el espacio», realizada en 1968, para señalar que el diseño de las tabletas ya se imaginó en aquellos años por Stanley Kubrick.
Hace un mes, un consorcio liderado por Microsoft, Apple y Oracle compró patentes de la empresa Novell, responsable de la distribución de Linux SuSe (software libre), por valor de 2.200 millones de dólares. El objetivo de dicha compra erafrenar los desarrollos de Google, principal competidor de todos ellos, sobre todo en lo referente al sistema de telefonía móvil Android. Finalmente, las autoridades estadounidenses han revisado la operación, que sospechan malintencionada, y el departamento de justicia ha anunciado que limitará este tipo de compras masivas por parte de Microsoft.
Otro caso de litigio de patentes con final perverso es el mantenido por Microsoft y el fabricante HTC. Gracias a un acuerdo entre estas empresas, Microsoft gana hasta cinco veces más con la venta de teléfonos móviles fabricados con HTC, que funcionan con el sistema operativo Android, que con los ingresos conseguidos con las ventas de su propio sistema operativo, Windows Phone.
El objetivo de Google con esta compra es asegurarse un desarrollo donde ostente la autoría de todas las patentes
En los últimos meses se han acelerado las compras relacionadas con las patentes. En mayo, un consorcio liderado por Apple, RIM, Microsoft y Sony, entre otros, compró los activos de Nortel, formados sobre todo por miles de patentes. El objetivo, como en la compra de Novell, es frenar a Google y su sistema operativo Android. Por su parte, Google anunció el pasado mes de agosto la compra de la sección dedicada a la telefonía móvil del fabricante Motorola.
Pretende de este modo asegurarse un desarrollo donde ostente la autoría de todas las patentes. Una de las razones de esta adquisición es poder fabricar directamente dispositivos móviles con el sistema operativo Android de igual manera que Apple controla todos los procesos en la fabricación del iPhone. Además, Motorola es una empresa que cuenta con más de 17.000 patentes relacionadas con la telefonía móvil, con lo que puede contribuir a que Google tenga menos problemas de infracción de patentes con otras empresas en los próximos años. De todas estas patentes, hay 18 queson las más importantes para Android y que rivalizan con innovaciones desarrolladas por otros fabricantes. Google también compró en julio patentes a IBM.