Antes de pretender pilotar un avión, es importante aprender a controlarlo, así como familiarizarse con los programas, los mapas y los códigos a los que se enfrenta un piloto de verdad. Un simulador de vuelo permite hacer todas esas cosas con un ordenador y una conexión a la Red; si ha ello se le suma un ‘metaverso’ (espacio digital) en tiempo real y con tráfico equivalente, la sensación de veracidad puede ser inigualable.
Los simuladores virtuales de vuelo son como videojuegos en los que el usuario, aspirante a piloto o no, toma contacto con la realidad de un avión
La historia de los simuladores de vuelo es parecida a la de los efectos especiales en el cine. Hace unos años, si había que hundir un barco, se construía un barco y se hundía delante de las cámaras. Hoy el software ha pacificado, y abaratado, sensiblemente los dos géneros.
Ya no hace falta subir a un piloto a un avión de verdad montado en un activador hidráulico y empezarlo a sacudir mientras se le mandan señales contradictorias por radio a ver qué hace. Los simuladores virtuales de vuelo son como videojuegos en los que el usuario, aspirante a piloto o no, toma contacto con la realidad de un avión y todos los factores que diferencian un aterrizaje elegante de una catástrofe aérea.
Además, tienen la ventaja de crear una copia perfecta de todas las decisiones del vuelo: en caso de duda, un piloto puede volver sobre sus pasos y encontrar la que le puso en peligro, así como aprender de los vuelos de otros usuarios.
‘Metaversos’ aéreos: ¿VATSIM o IVAO?
En Internet existen diferentes redes de vuelo virtual donde se crea un una réplica, o ‘metaverso’ del tráfico aéreo real. Para entrar como piloto o como controlador, hace falta darse de alta en una de ellas. Existen muchas: Project Open Sky, Vatsim, Air hispania, etc. Las más grandes son VATSIM e IVAO.
VATSIM e IVAO son como dos clubs de vuelo rivales; no están conectadas entre sí (aunque la mayoría de sus usuarios desearían que así lo fuera) y compiten fuertemente por liderar el mercado. Como en cualquier juego multijugador online, lo más inteligente es subirse al servidor que tenga más gente.
En este caso, sin embargo, ese factor es relativo porque la popularidad de cada uno está fuertemente ligada al mapa: la primera es una red americana y la segunda, europea. Utilizando el programa ServInfo, se puede comparar el tráfico de ambos sistemas en cada momento.
Pero los usuarios españoles encontrarán IVAO más conveniente. Al ser europea, hay un mayor número de españoles conectados a su servidor y, por tanto, más posibilidades de hacer amigos hispanohablantes durante el vuelo.
Cómo convertirse en piloto virtual
Para darse de alta en cualquiera de los servidores hay que realizar un registro online en el que se deberá decidir si se quiere ser piloto (‘pilot’) o controlador aéreo (ATC)
Para darse de alta en cualquiera de los servidores hay que realizar un registro online. Durante el proceso, el usuario deberá decidir si quiere ser piloto (‘pilot’) o controlador aéreo (ATC). Al finalizar, el sistema genera unos datos de identificación y una contraseña que es importante apuntar; serán requeridos más tarde para volver a conectarse y para descargar y configurar todo el software necesario para utilizar el simulador.
Todos los sistemas cuentan con un manual de instrucciones, una ‘sala de entrenamiento’ con manuales, un foro y un contacto con los administradores del sistema. Si surge algún problema, es conveniente repasar esos recursos o entrar en el foro de usuarios antes de acudir al administrador. Tanto IVAOcomo VATSIM tienen páginas en castellano.
Antes de empezar a volar, hacen falta dos cosas: la licencia de vuelo y el avión. Para la primera, bastan unos datos y una dirección de correo. Una vez obtenida, mostrará las horas de vuelo (tanto de piloto como de controlador), los exámenes realizados, el rango correspondiente y todos los premios conseguidos durante las sesiones.
Para el avión, hay que descargar una lista de programas disponibles en el centro de descargas del servidor: el programa de piloto o de controlador, la interfaz (un cliente para el servidor-proxy del sistema), un programa necesario para conectarse al servidor y ver los mapas, rutas, etc.
Lo siguiente es un programa específico para comunicarse online. Es tan importante como el resto y, antes de usarlo, hay que leerse concienzudamente el manual de códigos aéreos para no crear un conflicto virtual.
Finalmente, la librería de aviones permitirá elegir el avión soñado. En casi todos los casos se necesitarán los datos obtenidos durante el registro para instalar los programas en el ordenador.