A pesar de las novedades de mantenimiento con que cuentan las últimas versiones de Windows, el uso continuado de este sistema operativo, junto con acciones como instalar y desinstalar programas de forma constante, pueden afectar a su rendimiento. El desgaste se traduce en un arranque lento de aplicaciones, así como en “cuelgues” periódicos del sistema. Arreglar este problema de forma manual significa, a menudo, que el usuario tiene que ajustar y optimizar de nuevo, por sí mismo, algunos parámetros. Otra posibilidad consiste en realizar una reinstalación completa del sistema operativo. Sin embargo, las herramientas que lo mantienen libre de sobrecargas ahorran numerosas molestias.
Imagen: Michael Surran
Diferentes aplicaciones están pensadas para una tarea concreta, como desfragmentar el disco duro, optimizar la memoria RAM del ordenador e, incluso, gestionar de forma automatizada las actualizaciones de las aplicaciones instaladas en el ordenador. Sin embargo, las mismas solucionan un problema concreto, pero no arreglan un tema general, que puede afectar a varios aspectos del sistema operativo. Para solventar esta cuestión, diferentes programas se encargan de gestionar el mantenimiento completo de un ordenador que disponga del sistema operativo Windows.
Si se usan este tipo de aplicaciones sin un conocimiento básico de las acciones que se realizan, pueden ocasionar problemas en el equipo
En general, estas tareas consisten en instalar y desinstalar aplicaciones, eliminar archivos temporales, realizar búsquedas en el registro de Windows, desfragmentar el disco duro y corregir errores del registro, así como ajustar los parámetros de conexión a Internet para optimizar la navegación, en función del tipo de conexión de cada usuario. Además, en algunos casos, se incluyen herramientas para personalizar el entorno gráfico del sistema operativo más allá de las opciones integradas por defecto.
Si se usan este tipo de aplicaciones sin un conocimiento básico de las acciones que se realizan, pueden ocasionar problemas en el equipo donde se ejecuten, ya que se modifican aspectos esenciales del comportamiento general del sistema operativo. Por tanto, en caso de duda, es preferible no utilizarlas. Cuando se vayan a ejecutar las opciones de mantenimiento, es recomendable cerrar antes el resto de aplicaciones abiertas en el sistema, para asegurarse de que ninguna consume recursos del ordenador o modifica partes del sistema mientras las aplicaciones están en ejecución.
Algunos programas útiles
Una de las soluciones más completas es TuneUP Utilites 2010, que dispone de versiones para los sistemas operativos Windows XP SP2, Vista y Windows 7. Contiene diferentes funcionalidades que se ejecutan de forma independiente y que están pensadas para mejorar el rendimiento. Para ello, desactiva funciones que no requiere el usuario. También optimiza el arranque de los programas y mejora su rendimiento, además de solucionar los problemas más comunes en Windows, como errores de visualización, restauración de archivos eliminados o comprobación de errores del disco duro. Por otra parte, los usuarios también disponen de un apartado pensado para personalizar el entorno gráfico mediante el uso de diferentes estilos que se pueden descargar de forma gratuita. Esta aplicación tiene un coste de 39,95 euros y dispone de una versión demo gratuita y funcional de 15 días.
Advanced SystemCare es una aplicación destinada a reparar, optimizar y proteger el sistema operativo Windows. Entre sus funcionalidades más importantes destaca la capacidad para limpiar el registro y desfragmentar el disco duro, borrar ficheros temporales y malware, así como arreglar errores en el sistema operativo. Esta aplicación gratuita está disponible para los sistemas operativos Windows XP, 2000, Vista y Windows 7. También hay una versión «Pro» con funcionalidades pensadas para Internet y con capacidad para trabajar de forma automática y permanente en segundo plano. El coste es de 19,95 dólares al año por una licencia de uso por ordenador.
Imagen: CONSUMER EROSKI
Glary Utilitieses una aplicación pensada para el mantenimiento del sistema operativo. Entre sus diferentes funcionalidades, destaca la eliminación de archivos temporales innecesarios, reparación de archivos, optimización del registro del sistema, desinstalación de aplicaciones, etc. También incluye algunas funcionalidades pensadas para la seguridad y privacidad de la información, como proteger archivos mediante contraseña o cifrarlos, e incluso eliminarlos de forma permanente. Está aplicación dispone de versiones para los sistemas operativos Windows XP, 2000 y Windows 7 en 32 y 64 bits. Incluye dos versiones diferenciadas, una gratuita con las funciones más básicas para el mantenimiento del sistema operativo, así como una versión «Pro» con un mayor número de funcionalidades y soporte técnico gratuito. El coste de esta versión es de 39,95 dólares y hay una «versión demo funcional» de treinta días de prueba.
Imagen: CONSUMER EROSKI
CCleaneres una aplicación que se encarga de optimizar y limpiar el sistema operativo Windows. Entre otras opciones, permite limpiar archivos temporales del sistema, de aplicaciones de terceros y de los navegadores web más populares del mercado. También permite borrar cookies, historiales de navegación, formularios autocompletados, etc. Una de las funcionalidades más destacadas es la limpieza del registro del sistema operativo Windows, al borrar todas las entradas que hacen referencia a programas que se han desinstalado o incluyen rutas falsas. CCleaner es una aplicación gratuita y dispone de versiones para los sistemas operativos Windows 98, 2000, XP, Vista y Windows 7, en 32 y 64 bits.
