En un futuro cercano el móvil se podrá recargar con el calor que desprende la palma de la mano. Esta puede ser una de las aplicaciones de la nueva tecnología que están desarrollando científicos alemanes. Su objetivo es conseguir transformar la temperatura corporal en energía.
Según los investigadores del Instituto de Circuitos Integrados Fraunhofer, esta generación de energía se conseguiría gracias a las diferencias de temperaturas entre ambientes cálidos y fríos.
La transformación en energía se lograría a partir de los mismos principios por los que funciona un generador termoeléctrico, dispositivo que en su forma tradicional es capaz de producir hasta 200 milivoltios.
De momento, los científicos alemanes han conseguido crear circuitos eléctricos que consiguen producir 50 milivoltios con el calor humano como única fuente de energía.
Además de recargar el móvil, esta tecnología está pensada para hacer funcionar aparatos médicos, como, por ejemplo, medidores de hipertensión o de pulso.