¿Es importante contar con un botiquín de viaje?
Tener a mano un botiquín de viaje durante los diversos trayectos que vayamos a hacer en periodos vacacionales, largos o cortos, es fundamental porque no se sabe cuándo se va a necesitar. Tan importante como el contenido de ese botiquín es guardarlo en un lugar visible y conocido por toda la familia. Asimismo, es importante recordar que hay que reponer la caja de tiritas, de algodón… y revisar las fechas de caducidad de medicamentos tan comunes como el paracetamol, el ibuprofeno, aspirinas, Betadine, etc.
Qué llevar en el botiquín del viajero
Las personas con una enfermedad crónica deben llevar su medicación habitual para los días previstos, a ser posible en el equipaje de mano para evitar sorpresas desagradables. Como precaución deben preguntar a su médico cómo se comercializan esas medicinas en los países que vayan a visitar. Aparte de estos fármacos, se recomienda incluir de un modo orientativo estos otros:
- ➡️ Material de curas: gasas, esparadrapo, tiritas y unas tijeras pequeñas.
- ➡️ Antiséptico (alcohol).
- ➡️ Medicinas tanto para el estreñimiento, muy habitual con los cambios, o la diarrea, también frecuente en estos casos.
- ➡️ Analgésicos/ antipiréticos para bajar la fiebre, calmar el dolor de cabeza y el malestar general.
- ➡️ Preservativos.
- ➡️ Pastillas para el mareo.
- ➡️ Repelente de mosquitos y calmante para la picadura de insectos (en función del destino)
- ➡️ Protección labial.
- ➡️ Cremas protectoras para el sol y para la sobreexposición solar.
- ➡️ Pomada antiinflamatoria.
- ➡️ Toallitas húmedas.
Características del botiquín para tu viaje
- Ligero, pero a prueba de golpes: el neceser, caja o bolsa que usemos como botiquín de viaje debe ser resistente y ligero, para evitar que los medicamentos se rompan o se deterioren. Esto quiere decir que no debe estar expuesto a altas temperaturas ni a muy bajas.
- Tamaño: se recomienda llevar el botiquín en el equipaje de mano, sobre todo si tomamos una medicación a una hora determinada. Es una forma de evitar problemas si se retrasa el avión, el tren o si hubiera un atasco en carretera.
- Almacenaje: tanto en la maleta como una vez lleguemos a nuestro destino, hay que guardarlo en lugares sin demasiadas variaciones de temperatura o humedad.
- Conservar la caja de los medicamentos: conviene guardarlos en su caja original, no sacarlos, salvo que se guarden en pastilleros debidamente cerrados. También, se debe conservar el prospecto, junto con la receta o el informe médico. Esto es fundamental si se padece alguna enfermedad crónica.
- Hospitales y ambulatorios cercanos y de guardia: no está de más incluir dentro del botiquín un papel con las indicaciones sobre los hospitales y centros sanitarios más cercanos a tu sitio de vacaciones (teléfonos y dirección).