La actual coyuntura económica ha incidido en las previsiones del sector hotelero para los próximos meses y en las expectativas que los hoteles estiman sobre los principales parámetros indicadores que afectan a la cuenta de resultados, que son pernoctaciones, estancia media, precio, ingresos, gastos y rentabilidad.
El Observatorio de la Industria Hotelera (OIE), elaborado conjuntamente por la Confederación Española de Hoteles (CEHAT) y la consultora PricewaterhouseCoopers, registra unas expectativas bastante inferiores a las que se obtuvieron en el estudio del pasado año correspondiente a los mismos meses, pero muestra una percepción ligeramente más positiva de algunos indicadores en lo que respecta a la evolución desde principios de año.
Se prevé un ligero ascenso en el número de pernoctaciones con respecto al OIE anterior, aunque por debajo de las perspectivas que se tenían en el mismo periodo de 2008. Así, el 82% de las 64 asociaciones hoteleras integradas en la CEHAT afirma que decrecerá el número de pernoctaciones de turistas extranjeros y el 70% considera que caerá el de turistas españoles, frente al 13% y al 17% respectivamente que cree que se mantendrán.
Respecto a la estancia media, un 70% de los encuestados estima que será menor a la del pasado año. Además, más del 60% de los encuestados valora que decrecerán las estancias más largas y también las de entre 7 y 15 días.
En relación a los precios, la actual situación económica ha influido en las previsiones del sector hotelero. El 61% opina que los precios de los hoteles crecerán por debajo del 2%. Cabe recordar que estos cayeron un 15% en los seis primeros meses del año debido a las ofertas que realizaron los establecimientos para afrontar la crisis.
50.000 empleos menos
En cuanto al empleo, los hoteles generarán 50.000 puestos de trabajo menos para cubrir la demanda del próximo verano, lo que supone un descenso del 15% respecto al 1,5 millones de trabajadores contratados el pasado año, según los cálculos del sector. No obstante, a partir del 15 de junio la caída podría situarse cerca del 4%.
A la CEHAT le preocupa especialmente la ocupación en verano de los hoteles de Valencia y Zaragoza, así como el descenso de visitantes en las zonas turísticas de Menorca y Fuerteventura.