La Casa del Cubo de Burgos ha acogido ya a sus primeros peregrinos en su nueva etapa como albergue del Camino de Santiago. Cuenta con un total de 76 plazas fijas repartidas en literas, pero en agosto, la media de caminantes que pernoctan en la capital burgalesa supera el centenar.
Para tratar de cubrir esta demanda, los somieres y colchones de las viejas instalaciones del Parque del Parral, que funcionaron de forma provisional durante tres lustros, han sido trasladados al nuevo albergue por parte de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago.
El albergue del Parral se puso en funcionamiento en el año 1993 de manera provisional y se ha estado utilizando hasta ahora con el apoyo en verano de dos polideportivos cedidos por el Ayuntamiento por las noches cuando era necesario. Miles de peregrinos -17.000 sólo el pasado año- han pasado la noche en aquellas casetas de madera ubicadas en medio del parque. Ahora se cambia la naturaleza por el centro de la ciudad, a unos metros de la Catedral y en un edificio histórico adaptado a las necesidades actuales.
La Casa del Cubo o de los Lerma es un edificio del siglo XVI del que se ha conservado la fachada y remodelado sus 2.300 metros para acoger las nuevas instalaciones del albergue, la casa del hospitalero y zonas comunes. El nuevo albergue, dentro de la sencillez jacobea, cuenta con comodidades como lavadora y secadora o acceso a Internet.
Aunque algunas guías del Camino de Santiago ya contemplaban la Casa del Cubo como albergue desde julio, la necesidad de ampliar la potencia del suministro eléctrico retrasó hasta el pasado sábado su apertura oficial.