Durante los últimos años, las entidades bancarias que operan en España han digitalizado los procesos de contratación de sus productos, pero hasta hace bien poco, la mayoría todavía obligaba al cliente a acudir a la oficina si quería solicitar un préstamo hipotecario. La llegada de la pandemia de la covid-19, sin embargo, ha hecho cambiar de parecer a prácticamente todos los bancos, que por fin apuestan por comercializar sus hipotecas a través de Internet. Aquí explicaremos qué pasos hay que dar para pedir online un crédito para la vivienda, qué trámites no es posible llevar a cabo a distancia y qué hay que hacer para conseguir unas mejores condiciones.
Pasos para pedir una hipoteca digital
El proceso para contratar una hipoteca online no tiene demasiado secreto, pues es el mismo que habría que seguir si se pidiera financiación en una oficina, con la salvedad de que no es necesario salir de casa.
En primer lugar, como es lógico, hay que entrar en la página web del banco, consultar las condiciones de sus préstamos hipotecarios y decidir si vale la pena iniciar la solicitud o no.
En caso de que las condiciones ofrecidas sean interesantes, es necesario rellenar un formulario con nuestros datos (a veces también hay que usar antes una calculadora para ver qué cuotas pagaríamos) y enviarlo para que la entidad se ponga en contacto con nosotros.
Tras un estudio preliminar para determinar si la petición sería viable, el banco solicitará que le mandemos varios documentos y el informe de tasación de la vivienda, que mandará a analizar al departamento de análisis de riesgos.
En caso de que el departamento de análisis apruebe nuestra petición, recibiremos una oferta en firme de la entidad, que se nos enviará en los formatos previstos por la ley española (FEIN, FiAE, etc.). Tendremos un mínimo de 10 días para aceptarla y fijar una fecha para la firma de la escritura hipotecaria.
La doble visita al notario es presencial
Todos estos pasos pueden completarse a distancia sin ningún problema. Ahora bien, una vez aceptada la oferta de la entidad, sí toca salir de casa para ir a la notaría un mínimo de dos veces: una, para recibir asesoramiento gratuito sobre el futuro contrato, y otra, para firmar las escrituras de la hipoteca y la compraventa. Ambas citas son presenciales obligatoriamente.
- En la primera visita, el notario nos tiene que explicar con detalle las condiciones de la hipoteca que queremos firmar, lo que podemos aprovechar para preguntarle cualquier cosa que no nos cuadre o que no comprendamos del todo.
- Y en la segunda, la de la firma, el notario debe leer en voz alta la escritura, así que podremos comprobar que todo lo explicado coincida con el contenido final del contrato.
Imagen: Free-Photos
Banca online o tradicional: ¿qué es mejor?
Este procedimiento es válido tanto si pedimos una hipoteca por Internet a un banco convencional como si la solicitud se la hacemos a una entidad virtual.
Las condiciones, no obstante, pueden ser distintas en función de si acudimos a una u otra financiera: por lo general, con una tradicional obtendremos una gestión más personalizada y tendremos más poder de negociación, mientras que una online nos cobrará menos gastos adicionales (como comisiones) y la contratación será más ágil.
Pero hay bancos online o convencionales que también ofrecen las ventajas propias del otro tipo de entidad. Por ejemplo, hay financieras virtuales que cuentan con gestores personales, mientras que varios bancos de los de toda la vida son capaces de aprobar solicitudes en apenas unas semanas. Por eso, lo idóneo es pedir financiación tanto a bancos online como a entidades financieras más convencionales. De este modo, podremos comparar y negociar las condiciones de diversas hipotecas y nos podremos quedar con la financiera que nos ofrezca el mejor precio.