La concesión de créditos a las familias para la compra de vivienda explica prácticamente el 40% del crecimiento del crédito total entre 1994 y 2004 en España, según indica el último informe de Caixa Catalunya sobre la coyuntura económica.
El incremento del crédito inmobiliario ha ejercido un «efecto desplazamiento» sobre el concedido a otros sectores, en particular a empresas, y el destinado a la financiación de usos alternativos, como actividades productivas o, en el caso de los hogares, a la compra de bienes de consumo duradero, indica el informe.
La entidad subraya que «la dinámica expansiva del mercado inmobiliario ha alterado de forma significativa la dimensión y la composición del crédito interno de la economía española», con una creciente interrelación entre los mercados de crédito e inmobiliario en la última década, reflejada en «el paralelismo entre el aumento exponencial del crédito total y la evolución explosiva del mercado inmobiliario».
La caída en las necesidades financieras del sector público han permitido liberar recursos que han aumentado el peso del ámbito privado desde el 89,5% hasta el 96,2%. Así, el crédito a empresas ha caído 10,2 puntos porcentuales, hasta el 63,1%.
Entre 1994 y 2004, el crecimiento de la financiación crediticia concedida a las empresas aumentó anualmente un promedio del 11,7%, frente al 16,1% del crédito concedido a las familias. Los hogares han protagonizado el mayor incremento y ya representan un 43,3% del total de créditos concedidos.
Otros bienes
El estudio indica además que los hogares españoles destinaron de forma mayoritaria el crédito obtenido en estos años a la adquisición de vivienda, relegando progresivamente la financiación destinada a la compra de bienes de consumo.
El crédito para la compra y rehabilitación de vivienda creció en media anual durante la última década un 17,6%, frente al 11,1% del destinado a la adquisición de bienes de consumo duradero y al 12% del dirigido a la compra de otros bienes y servicios.
Como resultado, el crédito destinado a usos inmobiliarios representaba en 2004 un 75,6% del total de pasivos crediticios de los hogares, frente al 67,4% que suponía en 1994. La compra de vivienda del periodo entre 1994 y 2004 significa una media del 95,5% del crédito concedido a familias con esta finalidad.
Riesgo a medio y largo plazo
En el último informe elaborado por la Asociación Hipotecaria Española (AHE) en el que se presentan los indicadores del coste de la deuda hipotecaria de los hogares españoles, esta entidad advierte que «después de diez años de descenso continuado de los tipos de interés, los ciudadanos tienden a perder la conciencia del riesgo de interés».
Sin embargo, la AHE considera que «el riesgo es real» y estima que «en el supuesto de que a medio o largo plazo los índices de referencia habituales se situasen en los niveles máximos alcanzados en la U.M.E. (alrededor de un 6%), el incremento del coste actual de la deuda hipotecaria podría alcanzar un máximo de 1.000 euros anuales para todos los préstamos anteriores a 1997».
Por su parte, según este organismo, las hipotecas contratadas entre 1997 y 2001 podrían experimentar incrementos anuales entre los 1.000 y 2.000 euros respecto al coste actual. Estos incrementos podrían llegar a situarse entre los 2.000 y 2.800 euros en los préstamos formalizados de 2002 en adelante.