Los datos del Ministerio de Vivienda reflejan que a lo largo de 2007 los inmigrantes invirtieron 15.023 millones de euros en comprar pisos en España. Ello supone un descenso del 6,4% respecto al año anterior, cuando la cifra alcanzó los 16.049 millones de euros.
La vivienda de segunda mano acapara 10.221 millones de euros, mientras que los pisos de nueva construcción se llevan los 4.802 millones de euros restantes. Estas cantidades económicas son fruto de las 86.525 transacciones inmobiliarias que realizaron los extranjeros residentes en España el pasado año, un 19,7% menos que en 2006.
Analizados por trimestres, estos datos revelan una caída constante desde principios de año. Así, en los primeros tres meses de 2007 se cerraron 27.362 operaciones, para bajar a 25.097, 18.521 y 15.548 en los trimestres sucesivos.
Del total de las transacciones realizadas por los inmigrantes, el 96,8% (83.805) correspondieron a vivienda libre, y sólo el 3,2% (2.720) a pisos protegidos. Además, 61.858 operaciones (71,5%) fueron de viviendas de segunda mano y 24.677 (28,5%) correspondieron a nueva construcción. La Comunidad Valenciana fue la que registró un mayor número de transacciones inmobiliarias, 37.313, el 43% del total.