La construcción ha suavizado su ritmo de crecimiento, en un entorno de tipos de interés al alza, que afecta a la demanda de la vivienda, según un informe elaborado por las cámaras de comercio. Los servicios permanecen en la línea de los últimos trimestres, con incrementos superiores al 3,5%, y la industria inicia el año con tasas superiores al 1%.
La organización se muestra preocupada porque el diferencial de inflación respecto a la zona euro se ha disparado por encima de 1,6 puntos porcentuales y asegura que «los precios energéticos y los alimentos no elaborados están detrás de estas tasas».
El esfuerzo financiero de los hogares españoles para acceder por primera vez a una vivienda se sitúa entre el 45,5% y el 52,4% de la renta
El documento refleja que el patrón de crecimiento de la economía española cambia. El consumo de los hogares y la construcción pierden peso, mientras que el sector exterior muestra un comportamiento más equilibrado. No obstante, la competitividad de los productos y servicios de las empresas nacionales proseguirá su deterioro y la demanda externa mantendrá su aportación negativa al Producto Interior Bruto (PIB).
Pese a todos estos comportamientos, las cámaras sostienen que la economía española continuará con su dinamismo tras crecer un 3,5% en el primer trimestre del año. Las previsiones indican que el desarrollo en el segundo trimestre será del 3,4%, pese a que la desaceleración de la construcción y del consumo se prolongará, pero la demanda externa podría reducir su influencia negativa.
En cuanto al entorno mundial, el motor global de la economía se centra en la región asiática, con especial relevancia de la economía china, la cuarta potencia del mundo, y el resurgimiento de la India. El dinamismo de esta área permitirá mantener el comercio internacional y, principalmente, las exportaciones. La pérdida de competitividad de la economía española, en cualquier caso, se mantiene, debido a un diferencial de inflación respecto a la zona euro que se sitúa en máximos de los últimos nueve años.
Otro informe
Según el último informe de coyuntura de Metrovacesa, el esfuerzo financiero de los hogares españoles para acceder por primera vez a una vivienda se situará este año entre el 45,5% y el 52,4% de la renta familiar, en función de si el plazo de amortización del préstamo es de 20 ó de 25 años.
Esto supone elevar en 6 y 6,4 puntos porcentuales, respectivamente, el esfuerzo que tenían que hacer las familias españolas en 2005. Del informe se desprende, además, que este porcentaje es el más alto de los últimos 13 años, cuando los hogares españoles tuvieron que destinar el 53,4% de su renta a la compra de un piso.
Sin embargo, el descenso de los tipos de interés en los últimos años ha moderado el aumento del esfuerzo, que en 2006 se situará, a pesar de los mayores tipos previstos, todavía por debajo de los niveles registrados en 1990 y 1991, cuando era necesario destinar el 67 y el 68,9% de la renta familiar a la adquisición de una vivienda.