Pongamos que tenemos una hipoteca sobre nuestra vivienda y que, de repente, contamos con unos ingresos adicionales gracias a una paga extra, el premio de un sorteo o cualquier otra circunstancia. En estos casos, es más que probable que usemos el dinero para saldar una parte del préstamo, pues así disminuiremos el capital pendiente y pagaremos menos en intereses. Si lo hacemos, el banco nos dará dos opciones: reducir la cuota mensual o acortar el plazo de devolución. Pero, ¿cuál sería la más conveniente? Lo veremos a continuación.
El ahorro es mayor si se acorta el plazo
Adelantar capital, como es lógico, modificará el cuadro de amortización de nuestra hipoteca: el banco nos dará a elegir entre rebajar el importe de las mensualidades (manteniendo el mismo plazo) y reducir el plazo pendiente (manteniendo la misma cuota). Y de esas dos opciones, la que permite ahorrar más dinero en intereses es acortar el tiempo de vida del préstamo.
La razón es sencilla: si se acorta el plazo, los intereses se generarán durante menos tiempo, así que el total que habrá que pagar por este concepto disminuirá más que si se rebaja la cuota y se mantiene el mismo periodo de amortización. Por ello, si lo que queremos es ahorrar el máximo dinero posible, lo idóneo es decantarse por esa alternativa.
Ejemplo práctico: esto es lo que se ahorra con cada opción
Con un ejemplo práctico es más sencillo ver qué opción sale más a cuenta. Pongamos que tenemos una hipoteca de 150.000 euros con un interés del 2 % y un plazo original de 30 años. Esto es lo que pasaría si se devolvieran 25.000 euros por adelantado en el último mes del año 15:
- Con una reducción de la cuota, las mensualidades pasarían de los 554,43 euros al mes a los 393,55 euros, mientras que el ahorro en intereses al finalizar el plazo (sin modificaciones) sería de 3.957,89 euros.
- Con una reducción del plazo, se seguirían abonando unas cuotas de 554,43 euros mensuales, pero el periodo de devolución pendiente pasaría a ser de 10 años y dos meses. En este caso, ahorraríamos 7.161,50 euros en intereses.
Hipoteca:150.000 euros (Interés2%) A pagar en 30 años | Cuotas mensuales | Ahorro en intereses anual | Periodo de devolución pendiente |
Reducción de cuota amortizando 25.000 euros por adelantado en el último mes del año 15 | 393,55 euros | 3.957, 89 euros | |
Reducción de plazo amortizando 25.000 euros por adelantado en el último mes del año 15 | 554,43 euros | 7.161, 59 euros | 10 años y dos meses |
Parece claro, pues, que se ahorra más dinero si se acorta el plazo.
Ahora bien, con una rebaja de la cuota de la hipoteca también se pagará menos en intereses, aunque algo más que con la otra opción. Así que no es una mala alternativa, si lo que nos interesa es pagar menos dinero cada mes.
¿También si se puede desgravar por la hipoteca?
Esta teoría es válida para todas aquellas hipotecas que se hayan contratado a partir del 1 de enero de 2013. En las firmadas antes, sin embargo, sus titulares pueden practicar la deducción por adquisición de vivienda habitual, que permite ahorrar en IRPF hasta el 15 % sobre lo pagado cada año por el préstamo.
Si se puede aplicar esta deducción, es posible que sea más conveniente reducir la cuota en vez del plazo. Y es que quizás ahorraríamos más dinero practicando la desgravación año tras año con el plazo original que acortando el periodo de devolución y manteniendo la misma mensualidad. Aunque eso dependería de las condiciones de la hipoteca en el momento de realizar el adelanto: del capital que quedara por reembolsar, del importe que se pagara antes de tiempo y del plazo pendiente.
Lo recomendable, en estos casos, es echar cuentas para calcular cuánto se ahorraría con cada opción: con la reducción del plazo y con la rebaja de las cuotas más la desgravación de la hipoteca. De este modo, podremos elegir el método que nos permita abonar una menor cantidad de dinero por nuestro préstamo hipotecario.