Una de las factorías chinas que fabrica los recuerdos que se venden en el parque temático Disneyland de Tokio ha sido cerrada tras descubrirse que violaba los derechos de los trabajadores. Un total de 800 empleados se han quedado en el paro.
El detonante del cierre de la fábrica Huang Xing Light Manufacturing, en Shenzhen (sur), ha sido un informe publicado el pasado mes de diciembre por la ONG Estudiantes y Profesores contra el Mal Comportamiento de las Empresas (SACOM), que denunciaba importantes violaciones de las leyes laborales chinas y la legislación internacional de seguridad laboral en siete de las empresas que fabrican productos de Disney en el sur del país.
Según SACOM, en estas fábricas el salario está por debajo del mínimo legal; se obliga a los empleados a trabajar más horas de las establecidas por ley, y se les ofrece alojamiento en condiciones insalubres.
La ONG cree que la clausura de Huang Xing Light es la peor respuesta a las violaciones de los derechos de los trabajadores, y reclama a la multinacional que asuma su parte de responsabilidad. Sin embargo, Disney niega estar implicada en el cierre.