Cientos de niños y adolescentes con diabetes se preparan para disfrutar de los campamentos de verano organizados por las federaciones y asociaciones miembros de la Federación Española de Diabetes (FEDE). En esta actividad de carácter formativo que se desarrollará en un entorno lúdico, los jóvenes pueden llevar a cabo un buen control de su diabetes y, a su vez, recibir apoyo y educación diabetológica, gracias a la participación de profesionales médicos y educadores. En las siguientes líneas se da más información sobre esta iniciativa y los beneficios que reporta a las familias.
Educación en campamentos para mejorar el autocontrol de la diabetes
Se acerca el verano y muchos jóvenes cuentan los días para que lleguen las vacaciones y poder disfrutar de su tiempo libre. No obstante, hay cerca de 10.000 niños en España, con diabetes tipo 1, a los que no siempre les resulta tan sencillo hacerlo. Para ellos, es vital llevar un control estricto de su alimentación, realizar pruebas de glucemia de forma regular, administrarse la insulina necesaria para evitar complicaciones… Todo esto puede suponer mucho tiempo de dedicación y también algunos quebraderos de cabeza.
Por suerte, la gran mayoría de las asociaciones de pacientes con diabetes desarrollan campamentos de veranos pensados para estos jóvenes. En ellos, pueden disfrutar de actividades de ocio y conocer a otros menores con diabetes, sin dejar de lado el control de su patología, ya que estos campamentos también promueven la educación diabetológica, el ejercicio físico y una alimentación equilibrada y adaptada a sus necesidades.
En 2017, más de 600 niños y adolescentes de entre 7 y 17 años formarán parte de estos campamentos, en los que colaboran numerosos voluntarios comprometidos y preparados. Además, son organizados por asociaciones con una gran experiencia apoyando a las familias de pequeños con diabetes, ya que estos campamentos llevan en marcha desde hace más de 50 años. Esto demuestra tanto la necesidad de que existan actividades lúdicas especialmente diseñadas para jóvenes con diabetes, como el éxito de las ediciones anteriores. De hecho, el estudio ‘Glycemic control and the psicosocial benefits gained by patients attending the diabetes camp‘ demostró en 2008 que los campamentos pueden tener un efecto positivo en la salud de los pacientes, disminuyendo sus niveles de hemoglobina glicosilada, tanto durante el campamento como en los meses posteriores.
Esto es posible ya que los menores que participan se encuentran en un ambiente lúdico y distendido donde, sin darse casi cuenta, pueden aprender algunas pautas, como controlar las raciones de carbohidratos, autosuministrarse la insulina, detectar los síntomas de una posible hipoglucemia, etc. Y todo esto siempre adaptado a las circunstancias de cada niño y según las actividades ofrecidas por cada campamento.
Beneficios de los campamentos de verano para las familias
Para los padres y madres:
- Permiten unos días de descanso.
- Tranquilidad, al encontrarse sus hijos en una actividad adaptada a sus necesidades.
- Información de primera mano, gracias al trato con los profesionales responsables del campamento.
Para los niños:
- Refuerzo del buen control de la patología.
- Mejora de sus conocimientos y actitud ante la diabetes.
- Aumento de su confianza y normalización de la enfermedad.
- Espacio para compartir vivencias y sentimientos.
Como declara Andoni Lorenzo Garmendia, presidente de FEDE: «Estos campamentos son una excelente alternativa para ayudar a los menores a adquirir responsabilidades con respecto a su diabetes, pero también son positivos para los padres, quienes comprobarán de primera mano que sus hijos ganan en confianza e independencia».
Por eso, desde la Federación Española de Diabetes, se anima a las familias con hijos con diabetes a valorar esta oferta de ocio que puede ser el plan perfecto para este verano. Para más información, se recomienda consultar el apartado de actividades de la web de FEDE en el que se muestran todos los campamentos de verano organizados por las asociaciones y federaciones de FEDE en España.