Llevas meses intentando encontrar un comprador para tu casa. Y aunque tienes miedo de tener que malvenderla, ya estás pensando en bajar su precio. Has probado de todo, menos con el home staging. ¿Por qué? Este “maquillaje” realizado por profesionales para mejorar la imagen de tu piso y hacerlo más atractivo para el potencial comprador sale más barato que ofrecer una rebaja en el importe de la vivienda (el coste de la actuación con esta técnica será siempre inferior a la bajada que debas hacer). Pero además, según dicen los números -y los expertos como el consultado para este reportaje-, es mucho más efectivo.
Has ordenado y limpiado bien tu casa para venderla, has hecho fotos y las has colgado en una web… Y no ves el fruto. No es de extrañar, pues, probablemente, lo has llevado a cabo teniendo en cuenta tus propios gustos. En cambio, el home staging no consiste en decorar (personalizar una vivienda a nuestro gusto) sino, precisamente, «en todo lo contrario: despersonalizar la vivienda«, explica Luis Ruiz, CEO de la empresa de Reformas Integrales e Interiorismo Sincro. ¿Para qué esa despersonalización? El objetivo es darle un aspecto de neutralidad, permitiendo captar la atención del mayor número posible de compradores. Es como una herramienta de marketing enfocada al mercado inmobiliario de la compraventa de inmuebles.
Imagen: Skitterphoto
¿Y cómo lograrlo? Lo más conveniente es hacerlo con ayuda de profesionales especializados, «técnicos que estudian los puntos negativos y proponen un paquete de soluciones para tu casa: arreglo de desperfectos, mobiliario, pintura, decoración, estilo, iluminación, etc. para que la vivienda salga al mercado con la imagen óptima», señala el experto de Sincro. La vivienda… o la oficina, el local, etc. ¡Se puede hacer en cualquier espacio! No importa su tamaño, su estado de conservación o el precio de venta.
Para «maquillar» el inmueble se despejan espacios y se les dota de la mayor luminosidad posible. Además, se colocan muebles de líneas sencillas y colores neutros, pocos adornos y sencillos… En realidad, es una puesta en escena. Y a veces, como en el teatro, incluso se utilizan muebles de cartón que recrean dormitorios, cocinas o salones para atraer al mayor número de personas posible.
¿De verdad es útil el home staging?
Si hay dudas sobre la utilidad de esta técnica, los siguientes datos despejan muchas de ellas. Una casa preparada recibe muchas más visitas que otra sin preparar, y las viviendas en las que se han realizado actuaciones con estas técnicas se venden entre un 65 % y un 85 % más deprisa. Además, conviene tener en cuenta que, según cifras de inmobiliarias estadounidenses -extrapolables a cualquier lugar-, el comprador se decide en los primeros 90 segundos, por lo que es primordial que la primera impresión sea positiva.
Lo corrobora el especialista de Sincro, quien apunta que, tras elegir la zona, el precio y la tipología de la casa, el primer paso en el proceso de la compra o alquiler es mirar las fotos de los inmuebles, ya sean en las propias oficinas de las inmobiliarias o en sus portales web. «Y si al posible comprador no le gusta lo que ve, la vivienda queda descartada directamente», añade. Por eso es muy importante preparar la casa, pues «hay que hacerla atractiva para los posibles compradores y que destaque sobre las demás», sostiene.
Así que si vemos que nuestra vivienda lleva mucho tiempo en el mercado, quizás sea un buen momento para cambiar de estrategia y apostar por el home staging. Y si aún no está a la venta o alquiler, «lo ideal es ponerla a punto desde un principio para que su presentación atraiga a una gran cantidad de compradores potenciales», sugiere Ruiz.
Un home staging básico, con una vivienda en buen estado de conservación y amueblada, puede costar desde 450 euros
¿Es un servicio muy caro? Lo normal es que haya diferentes paquetes que se adapten a las necesidades de cada cliente. «El coste del servicio depende del estado inicial de la vivienda, las actuaciones a realizar y el tiempo invertido», comenta. Por ejemplo, un home staging «básico» con una vivienda en buen estado de conservación y amueblada puede costar desde 450 euros; o si se busca algo más económico, está la posibilidad de contratar un asesoramiento con un informe detallado por unos 200 euros. Con una pequeña inversión «podemos incrementar la percepción del valor que el comprador tiene de la casa, por lo tanto es habitual conseguir mejor precio de venta o cerrar la negociación en menos tiempo», señala Ruiz.
Imagen: manbob86
Consejos útiles para preparar tu casa
Lo idóneo es acudir a profesionales para que transformen la casa en un espacio que guste a la mayor parte de compradores, potenciando sus puntos fuertes y minimizando sus defectos. Como no siempre es posible, aquí damos algunos consejos para preparar un piso lo mejor posible:
- Colores neutros. Hay que huir de los colores fuertes y apostar por tonos neutros: gris, beis, blanco…
Muebles… pocos y sencillos. Los muebles deben ser de líneas sencillas y cuanto más despejadas estén las habitaciones, mejor. En el caso de un piso amueblado, es importante «crear espacio, ordenar y eliminar elementos. También adquirir nuevos accesorios para conseguir un espacio más actual y acogedor», indica el experto de Sincro.
Orden y limpieza. Una forma de mejorar con facilidad el aspecto de la vivienda es «hacer una limpieza profunda», reconoce Ruiz. Y los manitas pueden encargarse de los pequeños arreglos y de los trabajos de pintura.
Decorar con plantas y velas. Las velas dan un toque personal y cálido a una casa, y son muy neutras (nada de velas de colores fuertes o formas demasiado originales). Las plantas gustan a todo el mundo y dan un toque decorativo que no resulta agobiante.
¡Fuera objetos personales! Ni fotos, ni albornoz, cosméticos y medicamentos a la vista. Quien vea el piso debe pensar que él mismo podría trasladarse a vivir allí al día siguiente.
Cuidado con los olores. Mejor no utilizar ambientadores fuertes, ni por supuesto permitir que haya olores a comida ni procedentes del baño.
Entrar en una casa “perfecta”, donde se adivina la mano de un decorador o una puesta en escena a conciencia puede despertar suspicacias entre algunos compradores. ¿Cómo reconocer si el “maquillaje” esconde defectos importantes?
Ante todo, conviene aclarar que la intención de la técnica home staging no es el engaño al vendedor. Consiste en resaltar los puntos fuertes y minimizar los puntos débiles de un inmueble. Por lo tanto, “no se trata de esconder los defectos, sino de arreglarlos”, explica Luis Ruiz, experto de Sincro.
En el momento de visitar un inmueble conviene prestar atención a los puntos que nos pueden ayudar a detectar ciertos síntomas de deterioro. Como señala Ruiz, hay que examinar bien los zócalos y detrás de los muebles para detectar posibles humedades; verificar que las instalaciones de electricidad, agua, clima, etc. funcionan de modo correcto; comprobar que todas las puertas y ventanas vayan bien; preguntar al propietario todos los arreglos y reformas que se han realizado con anterioridad, etc. Y, en caso de tener dudas, “siempre hay la posibilidad de contratar a un profesional”.