Las luces constituyen una parte fundamental de la decoración navideña. Antes de comprarlas, es importante comprobar que los embalajes presentan la información de seguridad correspondiente; y si se han de usar luces guardadas de años anteriores, que se encuentren en buen estado. Este artículo enumera las precauciones para evitar accidentes con las luces navideñas, detalla las características de las bombillas y el cable de las guirnaldas de luces y ofrece la información que debe aparecer en el embalaje de las luces.
Precauciones para evitar accidentes con las luces navideñas
Tanto si se guarda un juego de luces de años anteriores como si se han de comprar nuevas, es necesario revisarlos y asegurarse de que no contienen alambres desgastados, cables pelados, bombillas rotas o conexiones sueltas. Ante la menor duda de que no estén en perfectas condiciones, convendrá desecharlos.
De hecho, un estudio presentado por la Comisión Europea en diciembre de 2009 indicaba que el 30% de las luces de Navidad que se comercializan en la Unión Europea suponen «un grave riesgo para la seguridad en el hogar», ya que pueden provocar descargas eléctricas e incendios.
Conviene evitar la instalación de luces eléctricas en árboles de Navidad metálicos, ya que existe el riesgo de que la corriente alcance la estructura del árbol y ocurra algún accidente por electrocución. Por el mismo motivo, hay que impedir que las luces toquen elementos decorativos metálicos.
Las luces deben estar protegidas frente a la posible manipulación de los más pequeños de la casa
Además, dado que las bombillas pueden alcanzar una temperatura elevada, hay que evitar que estén en contacto directo con materiales inflamables, que pueden estar en el árbol de Navidad pero también en alfombras, muebles, cortinas, etc.
La manera más apropiada de colgar y sujetar las guirnaldas de luces es a través de bridas de plástico. Nunca se deben utilizar para esta tarea grapas, tachuelas o clavos, puesto que pueden perforar los cables. En ningún caso se debe empalmar una guirnalda con otra, a menos que estén diseñadas para ello.
Es importante apagar las luces cuando no quede nadie en la casa o por la noche, antes de ir a dormir. Y, por supuesto, se deben extremar las medidas de seguridad en relación con las luces, cables, interruptores, etc., cuando en la casa hay niños.
Características de las bombillas y el cable de las guirnaldas de luces
En la actualidad, las bombillas más utilizadas para las guirnaldas de luces de Navidad son las incandescentes de bajo consumo, que contienen un filamento en el interior, y las lámparas LED. Estas últimas son más caras que las incandescentes, pero consumen menos electricidad.
Si se funde una bombilla, lo idóneo es sustituirla por otra igual, con el mismo voltaje
Cuando se funde una bombilla, es necesario sustituirla por otra igual, con el mismo voltaje, para evitar sobrecalentamientos. Para ello, solo hay que retirar la bombilla estropeada y colocar la nueva (por lo general, el mecanismo funciona a presión). Esta operación se debe realizar siempre con la guirnalda desenchufada.
Respecto a los cables, los de las luces para interior suelen estar fabricados en PVC, mientras que los de uso en exteriores deben ser de materiales más resistentes, como goma o caucho. A la vista, estos materiales son fáciles de distinguir: mientras la goma y el caucho son de color mate, el PVC es más brillante. Para evitar accidentes, debe haber una distancia mínima de seguridad de metro y medio entre el enchufe y la primera bombilla.
Antes de comprar o instalar cualquier dispositivo eléctrico o luces que se utilicen como adorno navideño, se deben leer con detenimiento las indicaciones que figuren en el embalaje y las instrucciones que acompañen el producto. Cualquier guirnalda que se comercialice en la Unión Europea debe incluir en la caja información específica.
Tales indicaciones e instrucciones, además, deben constar siempre en el idioma oficial del país donde se venden. Se debe verificar también que en el paquete esté indicado el nombre y la dirección del fabricante y -si corresponden- del importador, ya que si se registrara algún problema o incidencia con el producto, son ellos quienes deben responder.
Es preferible optar por las guirnaldas de baja tensión, de 12 o 24 voltios y con transformador, las conocidas como de “clase III”. La propia caja debe informar de la posibilidad de cambiar las bombillas. También debe incluir bombillas de repuesto.
Además, es indispensable verificar si la guirnalda es adecuada para interior o exterior. Para ello, se debe prestar atención a los símbolos que aparecen en la parte externa del embalaje, ya que aportan valiosa información sobre el producto. Un cuadrado dentro de otro de mayor tamaño revela que las luces solo están indicadas para el interior de la vivienda, pues no soportan la humedad. Por el contrario, si en el embalaje figura un triángulo con una especie de gota en su interior, significará que la guirnalda es apta para el exterior de la vivienda, ya que está protegida contra el frío y las salpicaduras de agua.
La marca UL GS es una certificación voluntaria, aplicable en productos como electrodomésticos, equipos de laboratorio o luminarias. Los productos se evalúan según la Ley de Seguridad de Producto y Equipos Alemana (GPSG), basada en las normas armonizadas europeas. Las siglas de la Comunidad Europea indican que los productos se han fabricado de acuerdo a las directrices comunitarias de seguridad.