La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha advertido hoy de la presencia de restos de antibióticos en la miel, tal y como refleja un análisis que ha hecho público la organización, que señala que de 35 muestras de miel en 11 se encontraron restos de antibióticos.
La OCU recomienda a los consumidores que se fijen bien en lo que compran, ya que en el mercado conviven productos realmente buenos con mieles que merecen una mala valoración, por el recalentamiento y la presencia de antibióticos.
En la actualidad, la legislación no establece un límite de residuos de antibióticos en la miel. No obstante, la organización lamenta la presencia de estos fármacos, puesto que aunque no suponen un riesgo directo para la salud, sí contribuye a aumentar su presencia en todo nuestro entorno.
Por último, la OCU avisa de la falta de calidad en algunas mieles, ya que con el paso del tiempo el producto va perdiendo propiedades y frescura, proceso que se acelera con el calentamiento que a veces se le da para facilitar su envasado y también para evitar la cristalización.