Expertos en Dermatología y Nutrición que participaron ayer en el coloquio sobre «La importancia de la vitamina C en el cuidado de la piel y la salud», organizado por los laboratorios Roche Vitaminas, pusieron de manifiesto los beneficios que representan para la salud humana el consumo de esta vitamina.
Según estudios presentados por estos especialistas, el uso tópico de vitamina C mejora la firmeza de la piel, retrasa el envejecimiento de la misma y reduce el tiempo de cicatrización de las heridas, gracias a su intensa actividad antioxidante.
La doctora Aurora Guerra, jefa de la sección de Dermatología del Hospital Universitario Doce de Octubre de Madrid, aseguró que una de las acciones de la vitamina C es que estimula la formación del colágeno, constituyente de la piel que previene el envejecimiento.
Según Guerra, se ha demostrado una notable mejoría en la piel de las mujeres mayores envejecida por el sol que fueron tratadas con vitamina C. En este sentido, la dermatóloga señaló que la vitamina C aplicada sobre la piel tiene una clara acción preventiva antirradicales libres, que puede considerarse como un fotoprotector biológico de uso tópico.
También está comprobado que la vitamina C aplicada tópicamente consigue niveles 30 veces superiores en la piel, a los que se consiguen con la administración oral, y su permanencia en la piel tras la aplicación dura 48 horas, indicó Guerra.
Los requerimientos de esta vitamina son diferentes en función de la edad y el estilo de vida, apuntó el especialista en Nutrición Clínica y decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Alfonso X El Sabio de Madrid, el doctor Alfredo Entrala, quien señaló que los fumadores requieren hasta el 40% más de vitamina C, debido a la renovación metabólica.
Otros de los beneficios de esta vitamina, según Entrala, son que favorece el sistema autoinmune, acelera la recuperación del resfriado común, contribuye al aumento transitorio del tono bronquial, sirve de factor protector contra el asma e incrementa la absorción de hierro.
Consumo
El estudio EVE (Evaluación del Estado Nutricional Vitamínico en la Población Española), realizado hace tres años, revelaba que las españolas consumen más vitamina C que los hombres, sobre todo, entre la década de los 45-55 años.
En cuanto a las zonas geográficas, este estudio apuntaba a las regiones del norte de España como las que más consumían esta vitamina, mientras que Canarias y Levante eran las que menos la tomaban.
Respecto al consumo de suplementos vitamínicos, cerca del 10% de la población adulta española los consume de manera habitual y generalmente por autoprescripción, según la investigación.
