Ayer partieron hacia China los dos primeros miembros de un equipo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que investigará el origen de ocho casos de neumonía atípica o Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS) recientemente detectados en Pekín y en la provincia de Anhui.
Por su parte, la portavoz de la OMS, Fadela Chaib, confirmó este rebrote y la existencia de ocho casos -clínicamente confirmados o bajo investigación-, seis de ellos en la capital china y dos en Anhui, uno de ellos mortal.
El origen de este rebrote sería un accidente ocurrido en un laboratorio del Instituto Nacional de Virología de Pekín, donde se efectuaban pruebas con el coronavirus responsable de la infección para desarrollar una vacuna.
Dos de los casos sospechosos corresponden a personas que conducían las investigaciones en el laboratorio, quienes habrían contagiado a las otras seis personas, señaló la portavoz.
Las autoridades sanitarias chinas han ordenado la clausura del centro de investigación y que sus más de 200 empleados permanezcan en observación médica.