Científicos estadounidenses anunciaron ayer el descubrimiento del mecanismo celular básico que conduce a la obesidad y a la diabetes tipo 2. En un artículo publicado en la revista «Science», los investigadores de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard indicaron que el exceso de grasa ejerce una presión negativa sobre las células. Esa presión pone en marcha lo que califican como «una cascada de genes y proteínas» que en última instancia altera la función de la insulina. El resultado de ese trastorno es una inflamación celular y, por último, diabetes.
Sólo en EE.UU., la diabetes tipo 2 afecta a unos 18 millones de personas y es la causa de unas 200.000 muertes al año. Hasta hace poco era considerada una enfermedad de adultos, pero ahora se diagnostica también en jóvenes y niños que en su mayoría tienen graves problemas de sobrepeso.
«Hemos dado un importante paso en los esfuerzos por entender las raíces de la diabetes tipo 2 y las enfermedades metabólicas», dijo Gokhan Hotamisligil, presidente del Departamento de Genética y Enfermedades Complejas de Harvard, que dirigió al grupo de investigadores. «Es la pieza que falta y que integra los mecanismos de la enfermedad en diferentes partes del cuerpo, incluyendo los tejidos grasos, el hígado y el páncreas», añadió.
Nueva esperanza
Hasta el momento, los científicos tenían un cuadro incompleto de la forma en que la acumulación de calorías en exceso y de millones de células grasas desencadenaba un estado crónico de inflamación celular, así como la resistencia a la insulina.
Con el tiempo, esos problemas conducen a dificultades cardiacas y enfermedades hepáticas, además de las complicaciones de la diabetes, una de las cuales es la ceguera progresiva. Por eso, este descubrimiento científico abre una puerta para la esperanza a millones de personas.