La nutrición saludable reduce el riesgo de contraer cáncer y patologías cardiovasculares, así como de padecer complicaciones respiratorias y la aparición de diabetes, según un estudio presentado ayer por el Instituto Catalán de Oncología (ICO). El trabajo, que se enmarca dentro del proyecto europeo EPIC, destaca especialmente el beneficio que supone la ingesta de fruta y verdura. En este sentido, precisa que los participantes en el estudio que más frutas y verduras consumían tenían un riesgo de mortalidad hasta un 30% menor respecto a los que no tomaban estos productos.
Según los especialistas, la cantidad recomendable sería de 500 g de fruta y verdura diarios, equivalente a tres piezas de fruta y dos platos de verdura. En caso de que cueste alcanzar esa cifra, lo mínimo sería no bajar de un plato de vegetales y una pieza de fruta al día. Este hecho se explicaría por la presencia de compuestos antioxidantes en las dietas sanas, que mitigan las mutaciones, el envejecimiento y la muerte de las células del organismo, causadas por agentes oxidantes.
Otra investigación del mismo grupo del Instituto Catalán de Oncología, presentada también ayer, demuestra que la fibra presente en los cereales tiene un efecto protector frente al cáncer gástrico.